Raquel Argandoña vuelve a la TV por $ 12 millones y vetó a Pamela Jiles y Paulina Nin
Raquel Argandoña firmó contrato por cerca de $ 12 millones con el programa Maldita Moda de Chilevisión y vetó a Pamela Jiles y Paulina Nin, entre otras. Aseguran que a la primera pachotada que la mini-diva Fran García-Huidobro le diga en pantalla, ella reaccionará echándole toda la artillería encima. Y ya le pareció mal que el canal organizador del Festival le “recomendara” qué decir durante su regreso triunfal a la Quinta Vergara, en la jornada inaugural –MIRE LA VERSION IMPRESA DE ESTA COLUMNA EN EL DIARIO LA TERCERA–
La diva es la Quintrala de Reñaca. Hito del Festival. Dueña del legendario vestido metálico con que recibió una lluvia de pifias en 1981, cuando estaba en el jurado y se le ocurrió decir que ella era del pueblo, de los que miraban el show desde un árbol. La fundadora de la prensa rosa de la Ciudad Jardín, con un tórrido romance con el hispano Manolo Otero paparazzeado en la piscina. Y una noche en el actual certamen bastó para horas de comentarios en los diferentes canales.
CHV la anunció como su nueva contratación y horas después la regalona del cirujano plástico Héctor Valdés entraba al Festival con un modelo copiado de los Balmain de la mamá de las Kardashian y un peinado calcado de la “Claire Underwood” de House of Cards –VEA ACA A LOS MEJOR Y PEOR VESTIDOS DE LA PRIMERA NOCHE DE FESTIVAL-. Con Nacho Gutiérrez de chaperón y otras rubias con menos trote posando orgullosas para selfies con la veterana de la farándula.
Aunque Raquel ya estaba un poco molesta, porque en la señal anfitriona le enviaron un mail aconsejando que declarara que estaba súper contenta de volver a la televisión en Chilevisión.
Sus cercanos aseguran que Argandoña recibirá cerca de una docena de millones por el nuevo ciclo del símil de Fashion Police que lidera García-Huidobro. Y que la mamá de Kel Calderón solicitó no trabajar en el panel con enemigas suyas como Pamela Jiles o Paulina Nin.
Al consultarle por cada uno de estos puntos, Raquel esperó un par de segundos y colgó el teléfono. Como buena diva.
