Glamorama
Scarleth Cárdenas muy emocionada en Bienvenidos. IMAGEN TOMADA DE PANTALLA / CANAL 13

El gran dolor de Scarleth Cárdenas

Autor: Andrés Cantuarias / Cristián Farías / 30 junio, 2016

A los 42 años Scarleth Cárdenas lucha por encontrar la realización personal, la felicidad. En este largo camino a la panelista del matinal de Canal 13 le ha costado perdonarse situaciones que ocurrieron con personas muy queridas. Por eso lloró y se mostró muy sensible en Bienvenidos –MIRE AQUI EL VIDEO-.

Scarleth se reunió con la medium Natalia Geell, quien supuestamente se contactó con tres personas fallecidas que marcaron la vida de la periodista. Apareció su tío con el que compartían el amor por el fútbol, su abuela y su gran amiga. Con estas dos últimas Cárdenas siente que quedó al debe, que les falló a último minuto. Es uno de sus grandes dolores.

A su querida abuelita no la llamó a la hora que le dijo y murió sin poder hablar con su nieta adorada. Su amiga Gaby sufrió un fulminante cáncer y Cárdenas no tuvo el valor para estar con ella en el mes que logró sobrevivir a la enfermedad.

Con Gaby eran yuntas, compañeras inseparables. Scarleth explicó que cuando supo lo del cáncer no fue capaz de ir a verla porque no sabía qué decirle. Finalmente, cuando la amiga ya estaba en sus últimos momentos, la periodista fue a pedirle perdón. A través del contacto que hizo la medium, Gaby supuestamente manifestó que está orgullosa de lo lejos que ha llegado la periodista en su carrera.

Estos son algunos momentos de la sensible conversación de la vidente y Scarleth en el programa de las mañanas:

Natalia Geell: “Has estado triste. La sensación que tengo es como que estuvieses recordando el pasado y eso te entristece. Así como nostalgia del pasado. ¿Es así?”

Scarleth Cárdenas: “Es así”

Natalia Geell: “Aquí está súper fuerte la presencia de tu abuelita. Ella me dice que el último tiempo ella ya no podía moverse mucho”

Cárdenas: “Estuvo hospitalizada una buena cantidad de días. Ella era muy inquieta, muy de tomarme. Nunca me dijo ‘te quiero mucho’, o muy al final de su vida, si es que lo hizo alguna vez. Pero sí, le gustaba que yo estuviera cerca, que le tomara la mano»

Geell: “Disculpa Scarleth, ella me dice que nunca te lo dijo”

Cárdenas: “Es muy probable”

Geell: “Y que esa era una de las cosas que quedaron pendientes entre ustedes. Porque dice que a ti también te costaba decirlo”

Cárdenas: “Mucho”

Geell: “¿Tú no tienes hijos? Porque eso te lo reclama. Dice que te faltaron los hijos. Pero dice que no es tu prioridad. Ella dice que te entiende. Para ella no ha sido fácil entender tu forma de vivir las cosas, pero que es tanto su amor por ti, que tú sabes que jamás hubiera dejado de apoyarte”

Cardenas se emociona.

Geell: “¿Hay algo que le quieras preguntar o decir?”

Cárdenas: “Si me perdonó ese último día de no haberla llamado a las cuatro de la tarde, como ella me pidió. Sonó el teléfono a las cuatro de la tarde, me estaban avisando de que había sufrido un paro cardíaco. Me sentí tan mal conmigo, que empecé a llorar, a llorar, a llorar y nadie me paró.

«Estaba en mi auto y no podía manejar de lo mucho que lloraba. Cuando yo llegué Coquimbo, ella ya estaba dentro del ataúd. No sabía qué decir. Yo sentía que no tenía perdón y después me preguntaba si ella me habrá perdonado”

Geell: “Dice que para ella fue un dolor muy grande que no la hayas llamado. Le costó entender que no lo hayas hecho. La única persona con la que quería hablar por última vez era contigo”.