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Cecilia Bolocco pidiendo por favor a la prensa argentina que respete la vida privada de su hijo Máximo, a través del programa Pamela a la Tarde. IMAGEN TOMADA DE PANTALLA / CANAL AMERICA

La desesperación e impotencia de Cecilia Bolocco en Buenos Aires: «Esto es del terror»

Autor: Cristián Farías Ravanal / 12 junio, 2018

Muy afligida se mostró Cecilia Bolocco en Buenos Aires, al dejar Argentina junto a su hijo Máximo, de 14 años.

Como «del terror» calificó toda la dura situación que se vivió al llevar al niño para que tratara de ver a su padre, Carlos Menem, de 87 años.

A pesar de que lo ha visto unas seis o siete veces en su vida, y de que su hermanastra Zulema Menem Yoma le bloqueó la comunicación, el chico hizo todos los intentos por ver al ex Presidente.

Llegó a Argentina el viernes con su madre, quien tiene prohibida la entrada al domicilio de su ex mandatario en el barrio Belgrano.

Por eso Máximo ingresó sin compañía a la casa. Sin embargo, no puedo estar a solas con su papá, Zulemita lo retó y, al enterarse que estaba invitado su hermanastro Carlos Nair, el niño decidió retirarse –CONOZCA AQUI TODOS LOS ANTECEDENTES DE LA VISITA-.

Luego, Nair publicó en su Twitter una foto tomada durante los escasos minutos en que Máximo alcanzó a compartir con su padre y Zulemita, junto al rudo mensaje: “Que nadie se queje y digan que no pueden venir Ok?”. Por esto el viaje se hizo público.

Lo peor, y el hecho que dejó muy mal a Cecilia Bolocco, fue que Máximo concurrió por segunda vez al domicilio de su padre, ayer.

Sin embargo, esta vez ni siquiera le abrieron la puerta, ya que le dijeron que Menem se encontraba en el Congreso, cosa que en el programa Pamela a la Tarde, del canal América, dudaron. Explicaron que el actual senador rara vez asiste –MIRE AQUI EL VIDEO-.

Posteriormente, el niño regresó al hotel y pronto salieron rumbo al aeropuerto. Fue entonces que las cámaras del canal América captaron a la ex Miss Universo abandonando el lugar sumamente afligida, tratando de proteger su hijo menor de edad. Estas fueron sus palabras:

«(Lo encuentro) Pésimo, evidente. Esto se trata de la vida privada de un niño. Les voy a pedir respeto, por favor. Para nosotros ha sido tremendo y muy desgastante. Y esto obviamente no está en mis códigos de ventilarlo por la prensa

«Por favor, esto es del terror, jamás me imaginaba una cosas así, y yo como madre lo único que quiero es el bienestar de mi hijo.

«Les pido por favor. Se trata de la vida privada de mi hijo, que lo ha pasado fatal y no quiero un circo.

«Acá se encargan de ventilar todo. Los llaman a ustedes, cuentan historias.

«Sí. Cuentan historias del terror y no quiero participar de esto, por favor, y quiero mantener a mi hijo a salvo. Me voy, muchísimas gracias.

«Ustedes averigüen y se van enterar. Por favor, les agradezco mucho y no quiero que siga esta locura».