Glamorama
Mirna Schindler en Hola Chile. TODAS LAS FOTOS: EDUARDO ANGEL

Noticias a fondo, compras en la feria y baile en al Blondie: la agenda de Mirna Schindler

Autor: Carlos Zúñiga Jara / 29 junio, 2019


Desde que caminaba por pasillos de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Chile, una lolísima Mirna Schindler –MIRE AQUI LA GALERIA DE FOTOS– ya desplegaba ese encanto y calidez que suma al profesionalismo y excelencia de su carrera periodística.

Ahora, con una buena cantidad de investigados e importantes «golpes noticiosos» en su vasta trayectoria, la profesional continúa en el primer plano informativo en radio y en televisión. Pero dese hace un buen tiempo que decidió que la vida no es solo trabajo.

Aquí, Mirna comparte una rutina que comienza a las 5 AM y donde estar bien informada a toda hora es primordial. Aunque también comparte sus espacios en la feria, en la cocina o bailando en la disco Blondie… –VEA LA VERSION IMPRESA DE ESTA NOTA EN EL DIARIO LA CUARTA-.

RITO MATINAL

“Me levanto a las 5 y lo único que hago es darme una ducha tremenda, porque si no, no despierto. Levantarse a las 5 de la mañana es duro. De ahí me preparo un café en una cafetera italiana. Un muy buen café, en eso no reparo en gasto.

«Tengo un rito: me preparo una compota de frutas con yogurt y cereal y un sandwich para llevarme a la radio, lo cual es clave para poder mantenerme viva en las próximas horas que voy a estar al aire.

«Tipo 6.15 parto rumbo a la radio, llego cerca de las 6.35 y leo los diarios rápidamente. A las 7 estoy al aire como conductora del programa ADN Hoy, que son tres horas comentando noticias, haciendo entrevistas, análisis político, de la actualidad, en fin.

«Luego, los lunes, miércoles y viernes me voy a La Red, donde estoy de panelista en Hola Chile. Corro para poder maquillarme, peinarme e integrarme al panel. Partí en marzo, después de la entrevista que hice con los papás de la niñita Madeleine McCann.

«Cuando salió el documental en Netflix me llamaron para dar mi opinión respecto a lo que fue mi experiencia entrevistando a los papás de Madeleine, en Portugal, cuando yo estaba en Informe Especial. Y cuando terminé de participar en el matinal en esa ocasión, se acercan y me dicen: ‘nos gustaría tenerte de panelista’.

«En radio voy a cumplir siete años trabajando en la misma compañía. Uno ya tiene una rutina, una práctica, una dinámica y tienes claro no te puedes desentender de lo que está pasando.

«Estoy todo el día preparándome para el programa, actualizando, agregando nuevos elementos. No solo leyendo noticias, sino que estudiando las noticias. Porque yo no leo noticias, yo las estudio. Me siento lo más parecida a una relatora de la Corte Suprema: tengo el caso y tengo que estudiarlo para contarlo.

SAGRADAS RUTINAS

«Tengo varias rutinas. Por ejemplo, voy a la feria una vez a la semana. Compro fruta, las verduras, a veces incluso quedo con sobre stock. Pero prefiero el sobre stock a no tener la verdura suficiente para hacer la comida que a mí me gusta preparar. Me gusta mucho cocinar con las verduras de estación, mucha ensalada, sopas.

«Reciclar es otra de mis rutinas. Junto cantidades de plástico, voy y hago sagradamente mi trabajo de reciclar.

«(En la casa) Tengo ayuda tres veces a la semana, y los otros días cocino yo. No cuento con una vastísima agenda de recetas, pero tengo la convicción de que todo lo que hago me queda rico. Tengo muy buena mano. Ese día (de las fotos para esta entrevista) preparé una salsa pomodoro que me quedó increíble, con tomate pomodoro, aceitunas, un poquito de cebolla, zanahorias y ajo».

DULCE DEBILIDAD

«Siempre he sido súper sana. No fumo, tomo lo normal, en situaciones muy acotadas. Voy al gimnasio, me preocupo de estar en forma, no me dejo estar.

«Tengo una discopatía lumbar. Entonces, lo que me he podido demostrar a mí misma es que, en la medida en que me mantenga haciendo ejercicio, los dolores lumbares desaparecen. Dejo de hacer ejercicio y aparecen. No es solo un tema de estética y de vanidad, sino que también de salud.

«Como sano. Me encanta hacer filete al horno, me queda increíble, pero intento dosificar el consumo de carnes rojas. Una vez a la semana pescados, legumbres, pastas. Voy variando y cocino en la medida de mis posibilidades. Me preocupo de balancear la dieta. Mi debilidad son las tortas, kuchenes, y ahí me tengo que cuidar, porque me ha pasado que me he descuidado en alguna etapa de mi vida y lo he padecido.

“En las tardes a veces hago otras actividades periodísticas. Presto servicios. De repente me piden una asesoría, la hago, pero trato de cuidar mucho el tiempo para mí. Con los años he aprendido que es importante dejar un espacio para tu propio desarrollo personal, que sea algo distinto al trabajo».

OTRA MANERA DE MEDITAR

«Me siento absolutamente realizada en lo profesional y soy de las pocas personas afortunadas de este planeta que trabajan y hacen lo que les gusta. A pesar de aquello, el trabajo no puede cubrirlo todo. Me hago el tiempo para mi espacio personal, para una buena película, una serie, un buen libro, para ir al gimnasio, para salir a ver una muestra de fotografías.

«De lunes a viernes tengo un horario que me hace vivir como una monjita porque me acuesto súper temprano, tipo 21. Es una rutina muy ordenada, pero a veces me desordeno, o sino la vida sería una lata.

«Me encanta ir a bailar. Me gusta ir a la Blondie. Tiene la particularidad de tener distintos ambientes, no existe esa cosa de que hay puros viejos o puros jóvenes. Está súper mezclado. Es un espacio bien democrático, bien transversal.

«Me gusta la música de los ’80. Y la electrónica me encanta, me produce algo. Si estamos hablando de un buen DJ, creo que realmente se puede dar, para mí, una suerte de meditación en el baile».

HAY MAS VIDA QUE TRABAJAR

“Es súper importante cuidar mis tiempos, no volverme loca con el trabajo. Me encanta mi pega, pero no quiero una vida donde mi única razón de existir sea trabajar. Cuando eso ha ocurrido lo paso muy mal y me empieza a venir una sensación de ansiedad y angustia.

“Una vez en Mega estaba trabajando para las noticias, haciendo reportajes, y al mismo tiempo trabajando en la radio. Hubo un minuto en que acuñé la siguiente frase: ‘No quiero esto para mi vida’. Me encantaba hacer reportajes, ¿pero sabes qué? Lo estaba pasando tan mal, estaba tan enferma, llena de mañas, achaques, que me empecé a cansar. Y cuando acuñé esa frase tomé una decisión: dejé Mega y me quedé con la radio.

«Ahora que se dio la posibilidad con el matinal, se hizo compatible con mis horarios, siempre cuidándome. No quiero volver a lo que ya viví una vez. Para sacar un reportaje de Informe Especial llegué a dormir en el canal, a no llegar a mi casa en tres días. Eso ya lo hice, estuvo fantástico, fue una gran experiencia, una gran época, pero ya pasó. Estoy en otra etapa de la vida”.