Glamorama
Paula Bolatti fotografiada por Glamorama en febrero de 2019. FOTO: EDU ANGEL @edu_angel_photo / GLAMORAMA @glamoramacl

Paula Bolatti conoció a su padre a los 25 años: «Me dice ‘yo sabía que en algún momento esto iba a llegar y que tú me ibas a hablar…»

Autor: C. Z. / 22 junio, 2020

«La primera conversación fue rarísima, porque era hablar con un desconocido y no sabes si es tu papá. Es rarísimo», cuenta Paula Bolatti.

La modelo argentina que vive en Chile, donde se ha convertido en personaje televisivo, participó en un capítulo de La Divina Comida grabado hace meses y recién estrenado por Chilevisión.

En el programa también estuvieron Sabrina Sosa, Juan José Gurruchaga y Hotuiti Teao.

Uno de los temas de las sobremesas fue el testimonio de Bolatti, de 27 años, con respecto a su padre, con quien tomó tontacto solo recientemente.

Esta fue esa parte de la conversación:

Paula Bolatti: “Mi mamá nos crió a mi hermano y yo. Éramos tres nada más. Mi infancia es así, muy sencilla, problemas económicos, un sobrevivir constante. Soy de una familia bastante disfuncional”

Juan José Gurruchaga: “Y en esta disfuncionalidad, ¿tú papá es un personaje importante?”

Bolatti: “Fue un padre ausente. No sé si fue elección de él, no sé si fue falta de huevos, como decimos en Argentina”

Sabrina Sosa: “Tú papá no vivió contigo”

Bolatti: “No. No lo conocí directamente”

Gurruchaga: “O sea, no sabes una imagen de él”

Bolatti: “Lo conocí recién el año pasado. Entré en una especie de depresión. Yo venía con crisis de pánico, no entendía por qué estoy acá, qué soy, quién soy. Empecé una terapia alternativa. Y cuando me dicen ‘¿qué significa tu papá para vos?’, y había que representarlo en una obra de teatro, y había una guagua chiquitita, yo dije ‘esto’.

“Ahí la terapeuta me dice ‘esto no es normal’. Y le digo ‘¿por qué?, ¿por qué tendría que representarlo con algo grande?, si para mí no existe’. Y me dice que ‘justamente es eso. Que mientras no exista, no es reconocer y no es parte de ti. Te dio la vida, pero debes tener mucho de él’.

«Le dije ‘bueno, pero me va a costar mucho porque, por respeto a mi mamá, nunca accedí a conocerlo. Pero bueno, ahora que me lo dices, soy dueña de mi vida y puedo hacerlo. Hace rato que soy independiente’.

“Ahí fue que lo busqué por Facebook y le escribo. Y él al toque me llama por teléfono y fue rara la primera conversación. La primera conversación fue rarísima, porque era hablar con un desconocido y no sabes si es tu papá. Es rarísimo.

«Me dice ‘yo sabía que en algún momento esto iba a llegar y que tú me ibas a hablar o porque vas a ser mamá, estás embarazada, o porque hiciste una terapia’. Le dije ‘la segunda’.

“Él me hablaba mucho del tema espiritual. Filosofaba conmigo en esa primera charla. Y ya, desde la primera conversación, empecé a entenderme muchísimo. No sé. Muchas veces hablaba con mi mamá, ‘mami, qué te parece que la vida es injusta, ¿por qué pasa esto?’. Yo me pregunto muchas veces un montón de cosas, y mi mamá me decía ‘siempre te haces esas preguntas raras’.

“Y después nos juntamos. Conocí a toda mi familia Gómez, porque ese es mi primer apellido, y me encontré que tenía una hermana de nueve años, un hermano que tiene 21, primos, una familia enorme, tíos.

“Si es para sanarme, voy a hacer que esto sea de verdad. No le voy a hablar con rencor, no le voy a reclamar absolutamente nada, pero sí quiero saber qué onda la otra parte. Voy de a poco”

Sosa: “¿Cómo te sientes después de este reencuentro?”

Bolatti: “Es muy loco. Me sentí muy cómoda, muy parte de. Ellos tenían una foto mía y me tenían súper presente. Fue como ‘yo ignoré todo esto tantos años’. Es como que dije ‘mierda, ¿de qué me perdí?’”

Gurruchaga: “Por qué me negaron también… Hay que ver todos los puntos de vista”

Bolatti: “Hace un año atrás yo no pensaba en conocer a mi papá. ‘No lo necesito, no lo quiero’. Y di ese paso y no me arrepiento en lo absoluto…”

Sosa: “¿Fue lo mejor haberlo encontrado?”

Bolatti: “Fue un alivio. Me genera felicidad… Mi mamá tampoco sabe todo esto. Así que espero que no vea el programa (ríe).

“Cuando entendí eso, me liberé de una mochila tan grande que venía cargando por mucho tiempo de parte de mi familia. Porque no solo basta con irte a otro país. Es de verdad ser consciente de que tienes que hacer tu vida”.