Glamorama
Yamna Lobos y su hija en una foto que compartió hace unos días en su instagram @yamnalobos

Yamna Lobos: «De a poco he ido conociendo a mi hija, armando los horarios, organizándome, rearmándome…»

Autor: C. Z. / 29 julio, 2020

“Está sanita, está gordita, rica, exquisita. Crece un montón», dice Yamna Lobos sobre Agustina, su primera hija, que nació el pasado 20 de junio.

La bailarina de 37 años se contactó con Sigamos de Largo, donde se refirió a como ha sido su maternidad junto a su pareja, el ingeniero en informática Rodrigo Ramírez, en medio de la cuarentena:

Yamna Lobos: “Estamos en un momento súper difícil, complejo. Imagínate estar embarazada en cuarentena, con la incertidumbre de como va a ser el parto, qué va a pasar en el hospital, enfrentar todo eso.

«Después el encierro, encerrada con una guagüita. Yo soy madre primeriza, hay muchas cosas que no sé, que desconozco y que he ido aprendiendo en este proceso. La falta de los seres queridos, los amigos, la mamá, todas esas cosas”

Fran García-Huidobro: “Parir en pandemia es complejo. ¿Estabas sola en el parto? ¿Pudiste estar con tu pareja en el parto?”

Lobos: “Pude estar con mi pareja. Nos hicieron todos los exámenes respectivos antes de, y gracias que pudo estar, o sino hubiese sido muy terrible.

«Yo sé que hay madres que están enfrentando esa situación solas y yo no me hubiese imaginado sin la compañía de Rodrigo. Sobre todo en la previa, cuando uno está con las contracciones y que necesita apoyo. Sola no sé qué hubiese sido”

Maly Jorquiera: “Me gusta el morbo de saber, como para imaginármelo… ¿Fue parto normal?, ¿cesárea? Quiero imaginarlo”

Lobos: “Fue normal. ¿Y sabes qué? Fui el día viernes al doctor porque no tenía contracciones, no sentía nada y estaba en la semana 40 y fue como un ultimátum. ‘Veamos sábado o domingo o programamos cesárea para el martes’.

«Quería parto normal y, mágicamente, la naturaleza o la Agustina quiso salir, empecé a sentir tirante la guatita. En la mañana contracciones y a las 8 en punto desperté con una del terror. De ahí no pararon y fue parto normal”

García-Huidobro: “¿Y cómo está tu guagüita?

Lobos: “Está sanita, está gordita, rica, exquisita. Crece un montón. Independiente que no pueda dormir, y esté enfocada en mi guagua, el verla crecer y ver cómo está de linda compensa todo lo que uno pueda hacer”.

Luego vuelven a abordar el tema.

García-Huidobro: “Como mamá, ¿quién te ayuda? ¿Tu mamá está contigo? Porque sola…”

Lobos: “Con Rodrigo, los dos. Él hace una semana retomó el trabajo y paso solita las tardes hasta que él llega. Y ahí me las he tenido que arreglar de a poquito, aprendiendo. Igual es complicado, difícil, pero nada es imposible. De a poco he ido conociendo a mi hija, armando los horarios, organizándome de poco, rearmándome”

Jorquiera: “Yo tenía la sensación de que habías dicho de que no era parte de tus planes la maternidad. ¿Me equivoco o no?”

Lobos: “Sí. Lo que pasa es que tenía un plan A y un plan B. Mi plan A era seguir mi vida tal como estaba. Dije ‘ya tengo 37 años, 36 en ese tiempo, creo que no pasa nada, no me veo con guagua’. Tenía armado mi camino.

«Y mi plan B era si de repente tenía esa posibilidad de encontrar a alguien, que podía ser, tenía un ideal de poder armar mi familia, de ser mamá.

“En ese tiempo lo veía lejano porque no me había ido muy bien en el amor y cada vez se veía más lejano eso de tener pareja y ser mamá. Nunca me he sentido ni vieja ni nada, pero te empiezan a presionar socialmente. ‘Oye, se te va a pasar el tren y no vas a poder tener hijos’. Uno se empieza a estresar por esas cosas”.