Glamorama
Luis Jara en una foto que compartió en su instagram @luisjaraoficial en agosto pasado.

«El doctor me dice ‘¿qué música quieres escuchar (durante la operación)?’. ‘La mía, obvio…’»: Lucho Jara relata la cirugía de urgencia a la que fue sometido en enero

Autor: Fran Varela / 3 septiembre, 2020

«El dolor me estaba superando y a las tres de la mañana agarré al doctor, le pegué un combo a la muralla y le dije así: ‘¡Córtame la pierna conchatumadre!’. Ese era el nivel de dolor», cuenta Luis Jara.

El cantante y animador de 54 años se contactó con el espacio Siempre Mamá, que María Luisa Godoy emite en vivo a través del instagram @marigodoyibanez.

El rostro de Mega habló de su cuarentena, su salida del Mucho Gusto y la relación con sus padres, ambos ya fallecidos.

También se refirió en detalle a la emergencia médica que vivió durante el verano pasado y por la cual debió ser operado de urgencia. Este fue su relato:

“Yo tenía un desgarro, porque mis hijos son muy deportistas, entonces me pegué un pique en la playa con mi hijo del medio, que es seco, y me dio un desgarro. A mí nunca me había dado, es heavy.

“Tengo mucha resistencia al dolor, entonces me volví a hacer el matinal con un poco de molestias. Al poco andar, en enero, me fui con mis mejores amigos de toda la vida, nos conocemos hace 40 años, a Rapel. La Silvana estaba fuera de Chile. Y les digo ‘sabes que no me duele la pierna, juguemos’. Jugamos tenis, nadé y al otro día me amaneció una pelotita en el gemelo y me empezó a doler, dije ‘me voy a meter a la piscina, porque con el pataleo se me va a soltar el músculo’.

“Y cuando salgo de la piscina, te lo juro por Dios que mi gemelo no era esto, era esto. Y el dolor era un dolor que yo no te lo puedo describir.

«Llamé a mi kinesiólogo por videollamada y le muestro la pierna, y el kinesiólogo, que es un gallo muy piola, me dice ‘¿dónde estás?’. ‘En Rapel’. ‘Raja a la clínica más cercana’. ‘Pero es que…’ ‘Weón, ¡raja!’.

“Cuatro horas a Santiago, llego a la clínica, doce de la noche, me miran la pierna, me hicieron todos los exámenes. El dolor me estaba superando y a las tres de la mañana agarré al doctor, le pegué un combo a la muralla y le dije así: ‘¡Córtame la pierna conchatumadre!’. Ese era el nivel de dolor.

“Mi mujer y mis hijos estaban en Estados Unidos, yo estaba solo, les dije a mis amigos que se fueran y llegó un especialista. Cuando llega un especialista, un doctor recién bañado, como que lo fueron a despertar, el tipo dice ‘¿cómo tienen a este hombre acá así?’, y corren con la camilla, que es lo que yo siempre había soñado.

«Como en las películas, cuando tú ves que el gallo está en la camilla y mira las luces y los focos del techo. Yo sentía que estaba en una película y decía ‘esto era lo que yo quería, esto es espectacular, una operación de urgencia’.

“Y voy y entro al quirófano, me sacan de la camilla, me ponen… Y digo ‘me van a operar de verdad, encuentro que esta weá es increíble’. El tipo me dice ‘dame el teléfono de tu mujer por cualquier cosa’. ‘¿O sea me podría ir para el otro lado?’. Me dice ‘puede pasar cualquier weá’. ‘Mi señora no está en Chile’. ‘Dame el WhatsApp’. Y escucho al doctor, mientras yo me estoy muriendo de dolor: ‘Silvana, tu marido está en el quirófano, lo vamos a operar, pero por cualquier cosa…’ «Ese cualquier cosa es ‘se puede morir o le puedo cortar la pierna… Pero tranquila, vamos a hacer lo que se pueda’.

“A mí lo único que me importaba es que el weón me operara. Entonces corta y el tipo me dice ‘ya, ¿qué música quieres escuchar?’. Y adivina qué le dije yo… ‘La mía, obvio’. Le dije ‘Enamorado, desde los pies a la cabeza… (tema que el cantante lanzó en 2018)’.

“Y ahí viene la parte más exquisita, porque yo no sé si es una locura lo que te voy a decir, pero a mí me encanta la anestesia general. Esta cuestión que te dice ‘tres, dos, uno…’, es una cuestión increíble.

“Bueno, afortunadamente me salvé, porque ese coágulo podría haber mutado al cerebro, podría haber mutado al pulmón, podría haberme generado una necrosis, me podrían haber cortado la pierna.

«El cirujano hizo un trabajo extraordinario. Yo no como carnes rojas hace cinco años, lo que hace que tenga una gran proceso de desinflamación, porque las carnes son muy inflamatorias.

“El 8 de febrero tenía un concierto en el Monticello y era imposible que pudiera cantar con mis dos piernas. Hice una rehabilitación increíble, canté increíble, con mis dos patitas y nada poh. Al poco andar vino la pandemia, salí del Mucho Gusto y aquí estoy con mis dos patitas conversando contigo”.