Pancha Merino devastada
El fin de semana Glamorama informó sobre los trámites de divorcio de Pancha Merino –CONOZCA AQUÍ LA SEPARACIÓN DE LA ACTRIZ LUEGO DE TRECE AÑOS DE MATRIMONIO Y TRES HIJOS-.
Esto dio paso a que la panelista estrella del matinal de Canal 13 asumiera públicamente su situación personal y trasparentara las causas de su separación, la cual coincidió con la muerte de su adorado padre.
La actriz fue entrevistada por Martín Cárcamo en Bienvenidos. Entre lágrimas, Merino ahondó en los fantasmas de su niñez y desclasificó por qué el 2015 fue uno de los peores años de sui vida –VEA ACA EL VIDEO-:
Martín Cárcamo: “¿Panchita? ¿En quién te has apoyado estos meses?”
Francisca Merino: “En mi madre, en mi hermano. La muerte de mi papá nos unió harto. De verdad que, ahora que yo estoy separada, quiero llevar una súper buena relación con Claudio (Labbé, su ex marido), porque él es un excelente padre. Es un súper buen hombre, yo sé que él va a salir adelante.
“No quiero que mis niños vean que nos odiamos como yo vi a mis papás. Eso a mí me afectó harto. Cuando mi papá se estaba muriendo como que hice un recopilado. En realidad esto fue el mal manejo de los adultos que todos los hermanos nos lleváramos mal porque, en verdad, yo a mis hermanos chicos no los pescaba.
“Teníamos odiosidades unos con otros. Siento que nos hicieron sufrir mucho por sus diferencias. No tanto por la separación, sino que las diferencias, las descalificaciones mutuas.
“A pesar de lo fuerte y todo que ha sido, he apelado a la capacidad de perdón y siento que soy capaz de perdonar todo, sobre todo si es el padre de mis hijos y si es buen papá”.
Cárcamo: “Cuando tomas la decisión de separarte, ¿dónde vas? ¿dónde tomas apoyo?”
Merino: “Mi mamá, mis hermanas. Igual me sigo apoyando con Claudio, si bien nuestra relación de pareja no está, ya no tenemos nada en común, no tengo nada en común con su gente, lo único que tenemos en común son nuestros hijos; nosotros tenemos que seguir unidos por nuestro proyecto. Uno de mis grandes dolores era que mi hija Chloe no iba a tener recuerdos de sus papás juntos. No había una foto de yo, Claudio y ella.
“Porque es triste. Yo no tengo fotos de mis papás con una actitud de amor. Entonces, lo que menos quiero es que mi hija pregunte ‘oye, ¿entonces para qué me tuvieron si no se quieren? ¿Para qué me tuvieron si se odian tanto?’.
“Tiene que haber una cordialidad, tiene que haber un amor de amistad. Quiero seguir sentándome a la mesa, a disfrutar a veces juntos como familia. El día de mañana que él tenga su pareja o que yo la tenga, absolutamente va a ser respetada por mí. No quiero conflictos. Mis hijos ya sufrieron mucho, sufrieron harto viéndome llorar. Entonces, no quiero dáñarlos más de lo que los hemos dañado”
Cárcamo: “Tus diferencias entre una crisis y un quiebre ¿eso se mantiene a pesar que ha pasado más de un año del tema? ¿Es un quiebre definitivo?”
Merino: “Sí, es un quiebre que me costó harto asumirlo. Es un quiebre que me dolió muchísimo, porque de verdad tenía mucho miedo. No quería aceptarlo”
Cárcamo: “¿En qué momento fue definitivo? Porque al principio hay situaciones que son evidentes. Uno tiene una conversación, tratemos de arreglar la situación, démosle una vuelta. ¿O desde el principio esto fue ‘esto no tiene solución para mí’?”
Merino: “Es que no tiene solución”
Cárcamo: “¿Para ti no tiene solución?”
Merino: “No. Yo tengo mi conciencia súper tranquila. Creo que fui absolutamente honesta. Para mí los afectos no son esporádicos, son tajantes, son para siempre. Sobre todo con el padre de mis hijos y con mis grandes amigos. Para mí mis amigos están y yo estoy siempre con ellos”
Cárcamo: “¿Tú te equivocaste, Pancha?”
Merino: “No. Tal vez me equivoqué porque no abrí los ojos, no me di cuenta de cosas. También son temas que no tienen que ver con mi profesión”
Cárcamo: “Tienen que ver con la vida privada”
Merino: “Yo soy súper confía. Es fácil confiar, es rico confiar”
Cárcamo: “Lo dices tú, que hasta el día de hoy te apoyas en el papá de tus hijos”
Merino: “Me apoyo con él con mis hijos, con su educación. Y en mi hermano, en mis amigos, que tengo súper buenos amigos. Han estado súper preocupados por mí, me llaman mucho, pero yo también de repente quiero estar sola, ando súper poco sociable”.
Cárcamo: “A ti te pasaron muchas cosas al mismo tiempo. Incluso podrías hablar de una depresión postparto. Porque nace una hija, hay una separación, se enferma tu papá. Es todo demasiado. ¿Cómo evalúas el año que pasó?”
Merino: “Un año de dolor y de aprendizaje, porque uno aprende cuando sufre. Generalmente aprendemos cuando estamos sufriendo y no cuando estamos felices en la cresta de la ola. Toda esta situación me ha acarreado querer ser más humilde, más simple, buscar más el amor en las personas. Ser más cercana, porque trabajo en la tele hace tiempo.
“Esto para mí es una pega, es trabajo. No soy ni más ni menos que el resto de los seres humanos y nunca me he sentido así. Trabajando en farándula, en SQP, me fui envolviendo de ciertas energías que no eran parte de mí, pero que las asimilé para sobrevivir donde estaba.
«Hay un karma que se me devolvió. El hablar por hablar, el echar la talla por echar la talla. Al otro lado acarrea dolores o también se sienten mal. Yo creo que todo se devuelve en la vida”.
