La hiriente respuesta de Amaya Forch
Hay algo en lo que Amaya Forch ha sido fiel y constante desde que se separó de Amaro Gómez-Pablos, hace casi tres años: Nunca ha entrado en detalles del asunto y siempre les ha contestado a los noteros de farándula molesta, o con bromas, algunas mejor recibidas que otras.
Durante el último de esos encuentros de la actriz con reporteros de Intrusos y SQP, la actriz pasó de ofrecerles galletitas por la espera -como lo hizo en varias ocasiones anteriores-, a ningunearlos –MIRE AQUI EL VIDEO-.
La escena ocurrió al interior de los estacionamientos de un centro comercial. Forch se dirigía rumbo a su vehículo con los micrófonos de los espacios faranduleros chantados cerca de su boca durante todo el trayecto, que incluyó el trámite de pago del ticket de salida. Estos fueron los hechos y los posteriores comentarios en SQP:
Periodistas de Intrusos: “Queremos conversar contigo un ratito”
Periodista de SQP: “¿Cómo estás después de todo lo que has pasado, Amaya? ¿Has podido hablar con Amaro? ¿Es verdad que retiraste la denuncia, Amaya? ¿Qué te parece todo el revuelo que causó esto en los medios, Amaya? ¿No quieres decir nada? ¿Escuchaste las palabras de Amaro en Primer Plano? ¿Qué te parece que haya hablado? ¿No tienes nada que decir de las palabras de Amaro, que haya hablado en Primer Plano? Estaba molesto por todo lo que pasó ¿Cómo fue tu regreso al teatro? ”
Amaya Forch: “Ya que estuvieron como dos horas aquí, me podrían haber lavado el auto, poh”
En el panel:
Claudia Schmitd: “Esa demanda nunca fue retirada. Lo conversaremos en otro capítulo. Nunca fue retirada. No voy a hablar sin papeles. Pero ¿sabes qué? Me encanta el sentido de humor de Amaya. Yo lo que le diría a Amaya es: Con esa media pensión alimenticia, da de sobra para lavar el auto ¡Rájate con un lavado!»
Luis Mateucci: “Yo por 20 luquitas se lo lavo”
Schmitd: “Además el auto estaba siendo parte de aquel acuerdo familiar, también se lo pagaron. O sea, que pague por lo menos el lavado”
César Barrera: “Amaya debería aprovechar estas instancias de que los periodistas la van a buscar, ya que no le gusta ni hablar por el programa, ni contacto telefónico. Para que aproveche de hablar y dar sus descargos, porque es distinto cuando uno le pregunta y trata de contactarse y ella te manda a la reverenda punta del cerro, a través de una plataforma web, a que ella hable a la cámara y diga ‘mira, pasa esto’. Es lo más sano”.
