«Le dije ‘de aquí para abajo lo que sea… ¡El pelo no me lo toques!'»: la confesión íntima de Raquel Argandoña sobre encuentro con su pololo más joven
El ya tradicional momento de Raquel Argandoña que va los jueves en el matinal de Canal 13 esta semana estuvo entretenido, anecdótico y se extendió por una hora y 20 minutos.
La diva de 61 años se centró en contar la especial noche que había tenido con el pololo «18 años menor» que ella. Raquel viene hablando hace semanas de esta pareja suya, pero sin dar nombre ni mostrar fotos. Solo lo ha identificado con detalles como que es varonil y tiene los ojos verdes.
Con todos los integrantes de Bienvenidos como comparsa, Argandoña confidenció diversos detalles del encuentro con su pololo, el cual duró hasta las 01.45 AM.
«Muy weno el miércoles», comentó la ex intérprete de La Quintrala, muerta de risa. Mientras que una de sus revelaciones que causó especial atención fue la relacionada con su peinado:
«No lo pude disfrutar mucho porque, como yo me peino día por medio, le dije (a su pareja): ‘de aquí para abajo lo que sea, ¡pero el pelo no me lo toques!’. No, porque uno no puede hacer tanto movimiento.
«Como ya tenemos confianza, le dije ‘no me toques de aquí para arriba, el pelo’. El pelo es un tema, porque mientras… No me gusta que me toquen el pelo. Cuando se puede evitar lo evito. Pero cuando la pasión es mucha…»
En tanto, esto también fue parte del relato de la panelista estrella:
Raquel Argandoña: “Muy bueno el miércoles. Se hace más corta la semana”
Tonka Tomicic: “¿Qué te preparó tu amigo?
Argandoña: “Me preparó dos bandejas para picar. Había poco tiempo y había que aprovecharlo, porque si te sientas a la mesa tienes que llevar los platos, recoger los platos… Compré flores”
Tomicic: “¿Velitas?”
Argandoña: “Velitas. ¡Las velitas no calentaban nada! La calefacción no prendió… Me puse un vestido la raja. Era increíble, un vestido negro con alfileres de gancho (que sujetaban un corte en las mangas)”
Cárcamo: “Perdón, ¿tú te pones ese vestido en tu casa a las 19.15?”
Argandoña: “No me pongo el vestido a las 19.15. Era para encontrarme con él poh”
Cárcamo: “Pero en tu casa”
Argandoña: “Ah no, si voy salir a pararme en una esquina… ¡Estás loco!”
Tomicic: “Medias, ligas, vestido con alfileres de gancho”
Argandoña: “Sí, y nada de estas cosas de aros porque te molestan. Botín alto. Abro la puerta, beso rico, bacán. Pasamos a la sala, ¡hacía un frío! Me dice: ‘Si tienes frío para qué te vistes así’. ‘Lo que pasa es que yo no estaba acá, estaba en mi dormitorio, porque estaba trabajando’.
“Ahí prendí la estufa, porque la calefacción no la dan hasta el 11 de mayo. Y en el computador tenía papel y lápiz y no estaba haciendo ni una cuestión.
“Detalle: él toma vino y yo con mi espumante. Entonces, me dice: ‘Si estás muerta de frío vamos a tu dormitorio a conversar y nos llevamos las tablitas’.
«Llevamos las bandejas, pero son un cacho las bandejas, porque yo no tengo una mesa en el dormitorio. ¿A dónde iban las bandejas? Encima de la cama.
“Yo vivo en Las Condes. No es que sea una comuna ABC1, al alcalde le voy a decir. En el día mi departamento es poblacional, toda la gente toda cuelga la ropa en las terrazas. En la noche parece Nueva York porque está todo iluminado.
“Yo abro todo en la noche, se ve bonito. Él me dice: ‘Yo creo que, aunque tengas termopanel con estufa, igual si tienes todo abierto no se te va calentar el dormitorio’. ¡Cerré todo! Y todo bien”
Cárcamo: “Perdón… Cerraste todo, pero abriste algo…”
Argandoña: “¡Que eres ordinario!”
Cárcamo: “¡Pero déjenme terminar!”
Arganoña: “No abrí la cama, si a eso te refieres”
Cárcamo: “Abriste tu corazón, mal pensada”
Argandoña: “Lo abrí desde el primer día, desde que lo vi… Tiene que ser un vestido que se vea sexy. Tampoco medio parada en una esquina, pero que sea sexy, sensual y práctico. La cuestión práctica es fundamental, no te vas a poner una cuestión llena de botones”
Tomicic: “¿El tuyo era práctico?”
Argandoña: “Era muy práctico el mío… (risas)» –MIRE AQUI EL VIDEO-.