Glamorama
Sandra Solimano hoy en Viva la Pipol, en una imagen tomada de la pantalla de CHV. Su hijo Eduardi Mujica en una foto de archivo tomada de la web.

El testimonio de Sandra Solimano sobre su hijo actor que sufría bipolaridad y se suicidó en agosto pasado: «Toda la protección mental en Chile es muy baja y muy mala…»

Autor: F. V. / 2 diciembre, 2019

El pasado 13 de agosto se dio a conocer el fallecimiento de Eduardo Mujica Solimano, quien participó en las miniseries juveniles de Mekano y en el Teatro en Chilevisión, hijo de Sandra Solimano y Eduardo Mujica.

El actor de 44 años sufría bipolaridad y recibía tratamiento desde hace diez años. En agosto se quitó la vida.

Este lunes Sandra Solimano visitó Viva la Pipol para hablar sobre su hijo. Estas fueron parte de sus palabras:

“Él inició una vida espiritual hace diez años, cuando tuvo un primer intento (de suicidio) y su hijo lo salvó. Después de esa crisis él inició una vida espiritual porque sentía que su vida no tenía ningún sentido.

“Decía ‘yo tengo todo. Tengo éxito con las mujeres, tengo una carrera exitosa, tenga una familia maravillosa, pero nada me llena’. Sentía un vacío. Buscó y encontró en Dios un camino muy lindo.

“Felizmente nosotros teníamos las condiciones para que Eduardo fuera tratado y bien tratado. Estuvo en manos de un siquiatra durante diez años, donde iba cada tres meses a un control y recibía sus remedios que eran carísimos. Son muy caros, por lo tanto no toda la población… Y quiero aprovechar de decir que toda la protección mental en Chile es muy baja y muy mala.

«Los remedios de mi hijo costaban $200 mil, por lo tanto una persona que tiene malos ingresos, como es la mayor parte de población, no tiene posibilidad de tratarse. Y una persona bipolar sin sus remedios tiene consecuencias graves.

“Lamentablemente nosotros nos dimos cuenta que Eduardo era bipolar después de su primer intento. Nunca nos dimos cuenta. Hace diez años atrás tenía 34. Fue terrible, porque si Eduardo hubiera fallecido en ese momento hubiera sido horroroso porque no sabríamos por qué lo hizo.

“Hubo una pequeña señal, lo citamos a hablar un día, le dijimos ‘te notamos muy alterado, muy nervioso, muy acelerado’. Andaba un poco agresivo y sus reacciones no eran muy normales.

“Entonces lo invitamos a almorzar a la casa para hablar del tema y él se enojó y se fue. Normalmente no enfrentan, les cuesta mucho contar, porque él tampoco sabía lo que le estaba pasando.

«Tiene su primer intento, ingresa a una clínica, está internado con un tratamiento durante unos meses y el siquiatra llega a la conclusión de que es bipolar. Por lo tanto empieza un tratamiento, donde te pasan un manual de como tratar a un bipolar, porque no es fácil, y ahí la familia se hace cargo.

«Estuvo apoyado por nosotros y ahí Eduardo también inicia su camino espiritual, que también le ayudó mucho porque se entregó por entero a los demás. Eso fue muy lindo porque eso lo alimentó durante estos diez años.

“Hay indicios de actitudes un poco exageradas, los bipolares están arriba o abajo. Pueden pasar varias semanas de estar sobreexcitados, pueden gastar mucho dinero o ideas grandilocuentes, o caer en una depresión profunda.

“Lo que hace el tratamiento es mantenerlo en un cierto equilibrio, que tampoco es muy agradable. Eduardo me decía ‘mamá, me siento como en un estado neutro, de repente tampoco siento nada, me anulan las emociones’. Es muy complejo, porque en ese estado neutro tampoco lo pasan bien.

“Y otra cosa que hay que tener mucho cuidado es con el otoño y la primavera, porque tienen una luz especial que influye en los bipolares. Esa luz hace que se depriman.

“Yo siento que lo que le pasó a Eduardo ahora es que se adelantó la primavera y él tuvo una crisis. Y lo otro que siento es que se cansó de luchar, porque es una lucha eterna y tomó una decisión que yo se la respeto, como familia se la respetamos. Dejó una carta preciosa y ahí explica el por qué.

“Él siempre me dijo que yo era su mejor amiga. Era mi partner, teníamos muchas cosas en común, éramos los dos artistas. Mi hijo además de actor era fotógrafo. Teníamos una sensibilidad en común.

“Él eludió siempre el tema, pero muchas veces me dijo que a él le costaba, le costaba la vida, le costaba levantarse en la mañana, iniciar un día para él era todo un esfuerzo.

“La relación con él era muy fuerte, muy estrecha, es mi primer hijo y lo echo mucho de menos, eso es lo que más echo de menos… (se emociona)” –VEA EL VIDEO-.