Lola Melnick a 16 años de Morandé con Compañía: «La mentalidad era un poquito más retrógrada, cerrada, copuchenta, diferente… Aparte de eso, era más clasista»
Lola Melnick hizo un reflexión sobre su trabajo en Morandé con Compañía, programa en el que se hizo famosa en Chile entre 2002 y 2004.
La bailarina ucraniana de 37 años se radicó hace más de un década en Brasil, mientras su madre y hermana viven en Argentina y ella se casó con un dentista chileno.
Hoy Melnick viaja entre los países.
En marzo las medidas preventivas ante la pandemia de covid-19 la encontraron en una visita a Chile y debió quedarse en el país.
Hace un par de semanas la figura televisiva hizo un contacto con Al Otro Lado, la transmisión en vivo que Nataly Chilet realiza, donde habló de sus años en el entonces estelar del trasnoche de Mega:
Nataly Chilet: “¿Cuánto te ha costado a ti poder demostrar todo tu talento? Porque eres bailarina, animadora, tienes muchos talentos, hablas cinco idiomas, eres una mujer con mucha cultura. ¿Cuánto te ha costado a ti sobrepasar el tema de la imagen?”
Lola Melnick: “Cuesta bastante. Y más que la imagen, es tener la madurez suficiente para encarar ciertas cosas. Eso es un factor extremadamente importante. Lo comenté hace poquito.
“Yo llegué muy chiquitita a Chile, jovencita, niñita. No entendía la mentalidad de los chilenos. Y seamos claros, la mentalidad del 2004 no es la mentalidad del 2020.
«Era una mentalidad un poquito más retrógrada, un poquito más cerrada, más copuchenta, un poquito diferente. Entonces, me costó. Aparte de eso, era más clasista, más cerrada en ese sentido.
“Entonces, traspasar la barrera de haber participado de un programa, que se llama Morandé con Compañía, y después querer que te contrate una multitienda grande para ser rostro, había que hacer un traspaso, había que hacer todo un tema de imagen, había que trabajar bastante en eso.
“Y entender que ciertas cosas, dentro de mi naturalidad, mi espontaneidad, decía, hacía, qué se yo. Y de repente no era tan bien visto en la sociedad chilena, o algunos comentarios que yo hacía. Simplemente estar trabajando en un programa de televisión que tenía un cierto formato.
“Todo esto había que comprenderlo. Todo esto había que aprender. Y yo creo que me sirvió bastante como experiencia hasta para trabajar en Brasil e ir entendiendo, saber cómo manejarme.
«Y si la belleza me ha jugado en contra, la belleza o la simpatía, llamémoslo como sea, siempre juega a favor, pero si solamente tú trabajas y te dedicas a cierto formato. Después, traspasar este formato y ser una lectora de noticias… Entrémosle a picar”.
