«Si puedo elegir, creo que no volvería a animar un matinal…», dice Javiera Contador
“Si puedo elegir, creo que no volvería a animar un matinal», dice Javiera Contador.
Durante una entrevista en el espacio Reyes del Drama, en redes sociales, la actriz de 47 años repasó su carrera.
Entre otros temas, habló de la importancia de su personaje «La Kena», de Casado con Hijos y el cual continúa realizando, y de los matinales.
Contador estuvo años en Mucho Gusto y Buenos Días a Todos y esta es la reflexión que realiza hoy sobre este tipo de programas franjeados:
«Me parece soberbio decir ‘yo nunca más’, ‘eso no lo haría’. Uno no sabe, la vida da muchas vueltas. Pero ahora, si me preguntas, no, porque encuentro que es demasiado expuesto y la libertad que he adquirido como comediante, la vibración de ser quien soy con la edad que tengo y con el cuerpo que tengo. También me es súper cómodo no tener que tratar de gustarle a la gente.
“El matinal es súper agotador, duran eternamente. Tú en cuatro horas y media vas a hablar alguna weá, porque uno es así. Eso que dijiste, que es una estupidez, se agranda, está todo el mundo hablando que es importante. Si lo miras o si le dices algo es un tema, si no lo miras también es un tema. Entonces es de una tensión, es súper tenso hacer un matinal.
«Que la gente no vaya a interpretar que estás aburrido o que te interesa demasiado un tema. Hay gente que se peina con eso. Los periodistas se llevan mejor con las noticias y con todo eso. En cambio yo estudié teatro, entonces estar en un panel hablando ocho horas de la misma noticia… Pero fue una escuela atómica, aprendí muchísimo. Pero si me preguntas, prefiero estar mil veces donde estoy ahora.
“En una teleserie si bien puedes ser súper conocida, eres conocida porque a la gente le gusta el trabajo que estás haciendo, y si no les gusta la están viendo igual, por lo tanto igual está bien. Es un rol, un papel, te pueden decir ‘me gusta tu personaje’, ‘me carga tu personaje’.
“En cambio en un matinal uno está hablando temas, sobre todo en un Chile después de un estallido social, entonces no da lo mismo. Hay demasiadas cosas en juego en ese minuto. No me siento preparada para hablar de todos los temas, desde conflictos bélicos en otros países, hasta situaciones puntuales, ministros. Súper agotador.
“Además hay una línea editorial, los canales son canales, son unos holdings que tiene radio, medios, todo. Yo hice mucho matinal y cuando partí en el Mega era distinto. Mega es un canal mucho más open mind a cuando nosotros partimos.
“Pero no poder decir lo que tú quieres en un momento determinado porque eso tiene un costo. No porque no puedas, sino porque va alguien, políticamente te cae pésimo y tú decides escupirle en la cara figurativamente diciéndole algo, tienes que tener claro que Twitter, todos… Te tiene que gustar esa batalla. A mí esa vereda no me gusta, yo lo paso pésimo. Uno desde el lugar tratando de ser honesto con lo que uno es.
“Si me invitan a un programa a veces voy, no es que ‘ay, la tele…’ Sería súper cínica. Pero voy y vuelvo, tantos capítulos, vuelvo a mi casa y sigo haciendo lo mío. Esta cosa eterna que tienen a veces los franjeados o los matinales. Admiro a la gente que está, porque yo sé lo que es estar ahí y es súper fácil opinar de afuera, hay que estar ahí y es súper complejo.
“La gente tiene la sensación de que los canales no estaban diciendo lo que estaba pasando. Pero también tienes en Twitter a una derecha ultra conservadora que encuentra que todos los conductores son comunistas, y tienes a los otros diciendo que son todos unos fachos. Entonces estar al medio de eso es súper agotador”.