Glamorama
Chiqui Aguayo en una imagen tomada de la pantalla de Podemos Hablar, Chilevisión.

«Abre la puerta el carabinero y me dice ‘a ver, páseme la pata’. Me saca el zapato y el carabinero así, arrodillado, haciéndome masaje…», relata Chiqui Aguayo

Autor: Fran Varela / 13 noviembre, 2021

«Si me estás mirando, te mando un besito, porque realmente estaba desesperada», dijo a la cámara de Podemos Hablar Chiqui Aguayo, dirigiéndose al carabinero que, según relató, la ayudó cuando era universitaria.

Esta fue la historia que contó la comediante de 41 años en el estelar de conversación de Chilevisión:

“Corría el 2005, por ahí, y yo cuando salí de la escuela de teatro mis papás me regalaron un auto, un Kia Pop rojo. Yo iba a hacer clases al Arcis y tenía que subir una subida. Entonces iba agarrando esa subida, que nunca me voy a olvidar, porque realmente fue un momento de desesperación.

“Voy manejando, meto el embrague y siento un calambre, pero un calambre de esos que de verdad no pude mover la pata. Se me paró el auto. Empezó a quedar la cagá para atrás. Los bocinazos. Se bajó una galla y me dijo ‘¡¿qué te pasa?!’. ‘Es que tengo un calambre’ y la galla me ayudó.

“Y yo ñurda además, entre que trataba de hacer prender el auto, no podía agarrarme la pata y el calambre era cada vez peor. Cuando ya no puedes hacer nada, no te puedes parar, se te empieza hacer una pelota.

“No podía hacer prender la weá y de repente llegan los carabineros, porque tenía la cagá. El auto ya estaba frenado y no tenía nada que hacer. La gente gritaba ‘aweoná’. Así es la gente. Llega el carabinero y me dice ‘¿qué le pasa?’. ‘¡Es que me duele! ¡Tengo un calambre!’.

“Abre la puerta el carabinero, yo pensé que para decirme ‘yo le voy a correr el auto’. Y me dice ‘a ver, páseme la pata’. Me saca el zapato y me tira como para atrás. Y yo le digo ‘¡así no! ¡Es para el otro lado!’. Y el carabinero así, arrodillado, haciéndome masaje. Otros tiempos…

«El carabinero me dijo ‘póngase en el asiento de al lado, yo la voy a dejar’. Y el carabinero me fue a dejar a la universidad. Si me estás mirando, te mando un besito, porque realmente estaba desesperada».