«Entiendo que es importante la guerra. Pero ir a arriesgar reporteros. Es como ‘estamos aquí y nos va a llegar. ¡Cuidado! ¡Pah!’… ¿Para qué?», opina Viñuela
“Perdonen que lo diga, a mí me tiene las pelotas un poco hinchadas esto de la guerra. No porque no me importe la guerra. Obvio que me importa», partió comentando José Miguel Viñuela en uno de los capítulos de Desde Mi Cocina con la Nené de esta semana.
En el espacio que emite en vivo por Instagram junto la nana de su familia, María Vilches, la Nené, el animador se refirió a la cobertura que ha realizado la televisión chilena sobre la invasión de Rusia a Ucrania, al envío de periodistas y las situaciones que han vivido allá.
Así continuaron las palabras de Viñuela:
“El otro día caché la historia de una familia, con los niños en el auto, y les llega un bombazo. Eran. Entonces tú dices ‘weón…’ Y para qué decir de Putin, pastel.
“Pero más allá de eso, no entiendo qué hacen todos los canales. Entiendo que es importante la guerra y darle cobertura. Pero ir a arriesgar reporteros, meterlos en Kiev, perdónenme, pero demasiado. Es como ‘estamos aquí y nos va a llegar… ¡Cuidado! Nos vamos a mover… ¡Pah!’. ¿Para qué?”
Nené Vilches: “Tú tienes la opción de decir que no”
José Miguel Viñuela: “Tú tienes la opción. Pero para un periodista que hace mucho terreno, que le gusta la cosa, yo creo que debe ser motivador. Por ejemplo, si tú le ofreces a Rafael Cavada ir a Kiev, va a ir de todas maneras” (Viñuela realizó estos dichos antes de que Cavada viajara a Ucrania enviado por CHV)
Nené: “Y el que tiene el parche en el ojo…”
Viñuela: “Santiago Pavlovic”
Nené: “Va todo el rato”
Viñuela: “¿Pero sabes lo que pasa? El otro día lo estaba conversando con mi señora. Lo hablábamos mientras veíamos las noticias. Y le decía ‘te prometo que si hoy estuviera en la televisión y me ofrecieran, por abc motivo, ‘oye, necesitamos que te vayas al lado de la frontera’, o a otras ciudades de Ucrania, yo, justamente hoy día, con mis cuatro niños chicos, yo digo ‘paso. Busquen a otro’.
“Si esto te cuesta la pega, me costará la pega, pero ni cagando me voy a arriesgar sabiendo que tengo niños chicos. Esa es mi postura. No sé. Quizás el caso de los otros ya tienen hijos grandes, resueltos. Yo hoy siento ese cordón de dependencia”.