«A mí me avisan los niños que el papá tenía un infarto. Yo me quería volver loca…», relata Myriam Hernández sobre el infarto que sufrió su marido en 2020
«A mí me avisan los niños que el papá tenía un infarto. Yo me quería volver loca. Y en el canal le digo a la Vane, mi maquilladora. Y ese regreso a la clínica fue horrible”, relató Myriam Hernández en De Tú a Tú sobre el infarto que sufrió su esposo, el productor Jorge Saint-Jean, de 66 años.
La cantante estuvo en un capítulo de De Tú a Tú, que conduce Martín Cárcamo en Canal 13 y, junto a Saint-Jean, contaron cómo vivieron el problema de salud en septiembre de 2020. Este fue el diálogo:
Jorge Saint-Jean: “Cuando estábamos en pandemia, a fines del 2020, Myriam salía cerca de las ocho y media de la mañana en van a grabar su programa (Yo Soy) y yo la llevaba.
«Entonces viene y me dice ‘estoy lista antes’. Y yo le digo ‘uy, me duele la mandíbula acá’. Y me dijo ‘ya, vamos a la clínica’. ‘Qué vamos a ir a la clínica’, le dije yo, ‘si ya no me duele nada’.
“Ella, más inteligente que yo, va y le dice a la Amparo que es curioso lo que me pasó. Sube al segundo piso, habla con Jorge y la Mirita, que me tienen que llevar a la clínica. Baja de nuevo y le dije ‘sabes que me dolió de nuevo’. ‘Ya, vamos a la clínica’”
Myriam Hernández: “No quería que lo llevara. Yo le dije ‘bueno, yo no voy, pero te vas con los niños. Yo no me voy de acá hasta que no partas a la clínica con los niños’”
Saint-Jean: “Llegamos a la clínica y me va a dejar en urgencias. Digo ‘no. Estacionémonos’. Entro y la niña ‘¿qué siente?’. ‘Es que me dolieron las mandíbulas’. ‘Momento. ¿Presión?’, no sé cuánto. Me toman la presión y me meten en silla de ruedas rajado para adentro. ‘Raro’, dije yo.
“Y entró una doctora que hasta el día de hoy me acuerdo. No sé ni cómo se llama, pero me salvó la vida. Cuando la vi era chiquitita y muy joven. Y dice ‘qué traigan el electro con la camilla… Traspasémoslo al box de cardiología’. Y ahí yo dije ‘¿qué pasa?’. ‘Es que yo creo que usted está en un infarto’.
“Me acuerdo que había un médico que tenía barbita que me dijo ‘quédate tranquilo. Ahora vamos a ir a pabellón’. ‘¿A pabellón? ¿A qué vamos a ir a pabellón?’. ‘Es que te tenemos que operar’. Voy a avisarle a Myriam lo que estaba pasando y me quitan el celular. ‘Usted no habla más’”
Hernández: “Y a mí me avisan los niños que el papá tenía un infarto. Yo me quería volver loca. Y en el canal le digo a la Vane, mi maquilladora. Y ese regreso a la clínica fue horrible”
Saint-Jean: “Entonces, de repente, veo a Jorge y la Mirita en la puerta del box. Y dije ‘la cosa es complicada’. Y estaban hablando con un médico. Y en eso me dicen ‘vamos a pabellón’. Cuando paso al lado de ellos se me cayeron las lágrimas. Les dije ‘a lo mejor no los veo más’.
“Uno no sabe lo que es un infarto. No sabe lo que te van a hacer. No sabes si vas a volver o no. No sabes nada”
Hernández: “Le pusieron un stent”
Saint-Jean: “Y ahí me dicen ‘te vamos a colocar un stent, porque está tapado. Vamos a destapar y vamos a abrir’. Tú cachai que a las ocho y cuarto me sentía mal. A las nueve estaba operado. A las diez estaba en la pieza.
“Un mensaje para todos: cuando alguien tenga una duda de un infarto, o de una sensación curiosa, vayan a urgencia pero de inmediato. Mientras más tiempo pasa es peor.
«La misma habitación que ocupé yo era de otra persona que le tuvieron que hacer una cirugía a corazón abierto. Y en el caso mío no. ¿Por qué? Solo la diferencia del tiempo”.
