“Yo tengo cinco hijos. Dos de antes de mi matrimonio… A los 18 años fui papá y me vine a enterar como 20 años después», expresa José Alfredo Fuentes
«Tienes que responder bien como hombre nomás», afirma José Alfredo Fuentes sobre sus paternidades anteriores a su matrimonio.
El cantante de 74 años se casó a los 24 con Isabel Trías, entonces de 20, tuvieron tres hijos y él se separó de hecho en el año 2000. Sin embargo, nunca se han divorciado y siguen juntos a su manera.
Fuentes protagonizó un capítulo de De Tú a Tú emitido por Canal 13 hace un par de semanas, donde habló de sus hijos:
Martín Cárcamo, conductor de De Tú a Tú: “Tú tienes tres hijos de tu matrimonio con Isabel”
José Alfredo Fuentes: “Yo tengo cinco hijos. Tengo dos de antes de mi matrimonio, de mucho antes. No conocía a Isabel todavía. A los 18 años fui papá, creo que fue engendrado a los 17 o comienzos de los 18, y me vine a enterar como 20 años después. De una niña, la Sarita, que está en el sur. Le mando un beso a la Sarita y a toda la familia”
Cárcamo: “Eres papá a los 18 sin saber”
Fuentes: “Sí. Yo me fui del barrio, me puse a cantar, no nos vimos más”
Cárcamo: “Y te enteras 20 años después”
Fuentes: “Yo creo, porque estaba en el programa Éxito, año 87 seguramente, y llegó esta chiquilla. Me dice ‘yo soy hija de fulana de tal y entiendo que soy hija tuya’. Sorpresa. Había terminado el programa, me estaba esperando afuera. Y le digo ‘es bien probable, porque sí, en ese tiempo me vi con bastante frecuencia con esta persona que tú me estás hablando. Así que, ¿qué es lo que…?’. ‘No, no, nada, nada. Yo quería saber, conocerte y todo’.
«La encontré muy parecida a mi mamá, tenía rasgos de mi madre. Y nada poh, nos hicimos re amigos, fuimos a tomar once me acuerdo ese día y la seguí viendo, y hasta el día de hoy. Hoy día es mayor que yo, va a cumplir 56 ya (risas). Una buena relación con los nietos, bisnietos también”
Cárcamo: “Tuviste que contarle a tu señora”
Fuentes: “Dejé pasar un tiempito y después ya lo conté a mis hijos y a todos. Y también anterior a mi matrimonio, un muchacho de 36 que me quería conocer, a través de un amigo llegó a la oficina de Pancho Moreno, que era mi representante.
“Abrió la puerta y entró un cabro igual a un primo mío, yo le dije ‘no me digas nada weón, tú eres hijo mío’. Jaime. ‘¿Hagamos la cuestión para…?’. ‘Ya poh’”
Cárcamo: “¿Te fuiste a hacer el exámen?”
Fuentes: “¿Cuánto te dijo el Coco?”
Cárcamo: “Noventa y nueve coma nueve por ciento”
Fuentes: “Este era 107, 6. Y hasta el día de hoy bien. Ayer estuve con Jaimito nieto. Tienes que responder bien como hombre nomás poh. Un abrazo, decir ‘aquí estoy en lo que te pueda servir, cuenta conmigo, veámonos’”
Cárcamo: “¿Cómo lo tomó tu familia?”
Fuentes: “Extraño. No van a decir ‘maravilloso’, como en las teleseries, ‘abracémonos todos’. Pero tampoco sin ningún reparo. Pasó, es parte de la vida nomás, de algunas personas, digamos”
Cárcamo: “Es interesante escucharte en un periodo de tu vida que es muy distinto al que…”
Fuentes: “Sí, es más fácil hablar. La gracia de tener experiencia, de cumplir años, es que tú no tienes reparos en enfrentar las cosas tal como son, es parte de la vida. No has matado a nadie, no le has hecho un daño terrible a nadie. Sí, podría haber tenido mayor precaución, pero eran otros tiempos que vivíamos también.
“Entonces uno tiene la franqueza de hablar con la gente y decir ‘sí, efectivamente sucedió’. Si hay que pedir disculpas a alguien, pido disculpas. Y no solo por eso, por alguna otra cosa que pueda haber pasado en la vida y si he afectado a alguien… Me parece que no, pero si hay alguien que se sienta molesto conmigo, le pido disculpas. Además es una deformación de mi profesión. Uno nace para encantar, para entretener”.