«Fue una experiencia maravillosa. Pucha que fuimos felices…», recuerda Arturo Walden, «El Kiwi», sobre los años en que vivió con su amigo Felipe Camiroaga
“Fue una experiencia maravillosa», dice Arturo Walden sobre su amistad con Felipe Camiroaga y los años en que vivieron juntos.
El comunicador de 55 años, apodado «El Kiwi», se hizo conocido como notero en programas de los años ’90 y 2000 como Acompáñeme y Viva el Lunes. Luego condujo Zoolo TV en Mega.
Walden fue uno de los mejores amigos de Camiroaga. En Pero Con Respeto, late que Julio César Rodríguez conduce en Chilevisión, recordó el tiempo en que compartió hogar con el inolvidable animador fallecido en 2011, y también con Bibiano Casatelló, destacado productor y director de televisión, fallecido en 2021, otro amigo íntimo de Camiroaga, con quien realizaron programas.
Arturo Walden: “Cuando nos fuimos a vivir con mi querido Felipe, teníamos un departamento. En ese tiempo no había celulares ni nada. Entonces, cuando él estaba con una niña, el choapino, en vez de estar así (horizontal), estaba así (vertical). Y cuando yo estaba con una niña, también así.
“Ahora, yo una o dos veces. Pero con Felipe pasaba el choapino así (dado vuelta). Yo abría calladito y pasaba directo a mi pieza. Y él al revés también. Ese era nuestra clave, como no había celulares para saber”
Julio César Rodríguez: “La clave del choapino… ¿Y alguna vez usted rompió la regla, se le olvidó o no miró el piso?”
Walden bromea: “De repente, ‘oh, la famosa que está aquí…’” No. En todo caso al principio yo era el maestro, Felipe era como el aprendiz. Lo que pasa es que después el aprendiz… Pucha que fue buen alumno mi socio. Pero esa era nuestra clave”
Rodríguez: “Viviste como seis años con Felipe”
Walden: “Más o menos. Dos años en departamento. Luego vivimos con mi querido amigo Bibiano Castelló en una casa. Y después nos fuimos a vivir Camino a Farellones los dos. Después me casé”
Rodríguez: “O sea, vivieron dos años solos, dos años con Bibiano, y dos años más”
Walden: “Fue una experiencia maravillosa. Siempre digo, no para ponerme sentimental, pero pucha que fuimos felices”.
