«Haces conexiones con la fama. Yo antes no tenía ni un amigo que fuera de Plaza Italia para arriba… Ahora conozco gente que tiene plata que son buenas personas», expresa Pablo Chill-E
“¿Lo bueno que tiene la fama?”, le preguntó María Luisa Godoy a Pablo Chill-E, espacio que la periodista conduce en TVN.
El artista de 22 años cuyo verdadero nombre es Pablo Acevedo -uno de los más exitosos exponentes de la música urbana- contestó bromeando «las mujeres». Luego respondió:
«Haces conexiones con la fama, haces caletas de conexiones, llegas a lados donde no llegabas antes. Yo, por ejemplo, antes no tenía ni un amigo que fuera más de Plaza Italia para arriba, ahora tengo varios amigos así.
“Era como con todos los que tuvieran plata. Ahora yo conozco gente que tiene plata que son gente decente y que son buenas personas”
María Luisa Godoy: “Qué bonito lo que estás diciendo, porque efectivamente existe el prejuicio para lado y lado”
Pablo Chill-E: “Sí poh, porque uno dice ‘ah, los cuicos culiaos’, y los cuicos dicen ‘ah, los flaites culiaos’, y al final estás haciendo lo mismo que ellos. Entonces uno tiene que ir educando de a poco. La música de ahora, los urbanos, unieron un poco más a la gente del país, a la juventud”
María Luisa: “¿Cómo sientes que ha ido evolucionando? Porque tú dices que la música urbana une a las clases sociales, ¿pero fue en un comienzo así?”
Pablo: “No.En un principio no nos queríamos ni entre los que cantábamos porque, por ejemplo, los raperos no querían a los que hacían trap. Los que hacíamos trap no queríamos a los que cantaban reggaetón. Y aparte que nosotros no nos queríamos, no nos quería nadie. Decían ‘estos weones deben ser delincuentes’”
María Luisa: “¿Y cómo cambió eso?”
Pablo: «Con el tiempo, cuando fueron saliendo más artistas. El Poli (Polimá WestCoast) también siempre ha sido diferente, demostraron más el arte de la música en los videos, en fotos, en la forma de vestirse, y eso hizo cambiar a la gente la perspectiva de que nosotros sí éramos artistas y no éramos delincuentes”.