«Es muy buen padre, muy preocupado de sus hijos, no tengo que decirle ‘oye, anda a bañarlo, primero el champú, después el acondicionador…'», dice Faloon Larraguibel de su marido, Jean Paul Pineda
«Prefiero hacer yo las cuestiones, porque uno tiene una lista de cosas en su cabeza y, si le das el punto tres a él, al final terminas haciendo cinco extra», dice Faloon Larraguibel refiriéndose a su marido, el futbolista Jean Paul Pineda, con quien tiene tres hijos.
Los dichos de la ex figura de Yingo y actual panelista del canal cable Zona Latina se dieron en medio de una conversación sobre su vida como trabajadora, mamá y dueña de casa y el esfuerzo que ello conlleva.
Larraguibel estuvo en el último capítulo del espacio sobre salud mental Hazte Ver, conducido por Maly Jorquiera en redes y plataformas, y allí declaró: «Llegó un punto en que reventé, y ahora es ese punto. No quiero nada, no sé nada, estoy cag… de miedo todo el tiempo», sobre la carga de responsabilidades que tiene.
En tanto, esta fue otra parte del diálogo:
Psicólogo Javier Cerda: “¿Quién más está disponible para que te ayude y te acompañe en eso (los niños y las tareas del hogar)?”
Faloon Larraguibel: “El marido. El papá de los niños. Pero prefiero hacer yo las cuestiones, porque uno tiene una lista de cosas en su cabeza y, si le das el punto tres a él, al final terminas haciendo cinco extra.
«Porque lo mandas a hacer las mochilas, simplemente las mochilas, le pasas el horario, y aunque tú le digas donde está todo, él jamás va a encontrar nada. Yo hablo no solamente del mío, sino que en general del hombre. Pero no solamente del mío. No quiero que quede mal”
Maly Jorquiera: “Es que somos controladoras, pero si el papá la caga, es el papá, porque a mí también me pasa”
Cerda: “Quizás ahí habría que soltar ciertas cosas, no hacerse cargo de todo y repartir las tareas. Esa mochila quizás no queda cómo te gustaría, pero quizás esa es la forma…”
Larraguibel: “Porque le va a faltar un cuaderno, estoy segura, y me van a llamar. Es que uno lo tiene tan automatizado, o quizás yo. Llego del trabajo, tengo que hacer esto, después voy a dejar a los niños. Tengo tan en mi cabeza”
Jorquiera: “Todo organizado”
Larraguibel: “Claro. De lunes a viernes. Tan automatizado todo lo que tengo que hacer. Tengo siempre cosas buenas que decir de él como padre. Es muy buen padre, muy preocupado de sus hijos, no tengo que decirle ‘oye, anda a bañarlo, primero el champú, después el acondicionador’.
“Nada de eso. Él va a dejar a sus hijos, los va a buscar, sabe los horarios. Pero confiar en ese tipo de cosas que son más delicadas, más minuciosas, no puedo. Soy tan perfeccionista, tan cuadrada. Incluso con la limpieza, le puedes decir al otro ‘limpia ese cajón’, pero no va a quedar como tú lo limpias”.
A inicios de febrero pasado Larraguibel anunció el fin de su matrimonio. «Desde hace unas semanas decidí por fin a mi vida conyugal ya que se ha vuelto insostenible. He pasado por una serie de episodios muy duros con faltas de respeto, violencia, infidelidad, celos, etc», manifestó.
Un mes después asistieron juntos a un recital y ella declaró «yo tendré que ver al padre de mis hijos toda la vida y quiero que esa relación sea lo mejor posible. Las que no tienen hijos probablemente no lo entenderán, pero las que sí no creo que quieran una guerra constante con el padre de sus hijos. No puedo cambiar el pasado, pero si mi presente y mi futuro».