«A mi papá nunca lo había visto en ese estado de furia. Caminaba por la casa como un león enjaulado, controlándose para no ir a matarlo…», relata Connie Achurra sobre el abuso sexual que le hizo su hermanastro
«Me costó mucho darme cuenta que había abuso. Me di cuenta cuando grande y decía ‘pero este gallo tenía 20 y yo 14’. De grande logré procesarlo, 15 años después de que había pasado», relata Connie Achurra sobre el abuso sexual que sufrió por parte de un hermanastro.
Achurra es cocinera y activista de la alimentación saludable. Tiene 45 años y ha escrito con libros best seller de recetas. Es hija del actor Pato Achurra, que se hizo famoso en las teleseries a partir de los años ’70.
En Podemos Hablar realizó un nuevo testimonio sobre lo que vivió. Estas fueron parte de sus palabras:
«Antes nunca logré atar los cabos, no entendía, había cosas que estaban sueltas. Y decía ‘¿esto pasó, o yo lo cree en mi mente?’. Después me acordaba y se lo develé a mi familia. A ellos también se le cerraron cosas.
«Mi hermano me decía ‘es que ahora entiendo cosas que yo veía y no entendía. Y se me ataban cabos de cosas que nunca entendí que pasaban en esa casa’. Así es que súper sanador. Me costó mucho decirlo.
«Mi hermano por suerte no estaba en Chile (cuando Connie decidió contar el abuso). Mi hermano le pegaba combos a las paredes. A mí papá nunca lo había visto en ese estado de furia, que caminaba por la casa como un león enjaulado, controlándose para no ir a matarlo.
«(El abusador) Es un personaje que, curiosamente, no tiene redes sociales. Tú lo googleas y no aparece en ninguna parte. Es un perfil muy particular. Nunca más lo vi. Rompió todos los vínculos con la familia. Inventó unas cosas muy raras que yo después supe. No hay redes sociales. Tú lo googleas y no existe. ¿Quién no tiene redes sociales hoy día? Una persona que trabaja.
«Al principio, la reacción inicial de todos era ‘hay que vengarse. ¡Tenemos que vengarnos!’. Yo dije ‘no me quiero vengar de nadie’. Yo sané esa herida. Esta es la última parte que tenía pendiente.
«No me quiero llenar de odio ni de venganzas, ni quiero que mis hijas me vean vengándome de alguien. Es un capítulo que ya fue. Saqué las lecciones y aprendizaje y la vida se va a encargar de hacer juicio».
