«Me llegaban cartas extrañas, ‘ojitos de cielo’… Con ropa interior», «llegó a buscarme a la universidad», recuerda Kenita Larraín sobre acosador
«Me empezaron a llegar cartas extrañas, ‘ojitos de cielo'», recuerda Kenita Larraín sobre el acoso que en 2003 comenzó a sufrir por parte de un hombre que se hacía llamar «Víctor Lenon». La modelo hizo la denuncia y en 2006 declaró en Fiscalía.
Esta semana relató el episodio en Sígueme, espacio de farándula en el canal TV+:
«Comenzó en un desfile de Roberto Giordano en Viña del Mar. Me dijeron ‘te tienen unas flores y unos regalos’. Dije ‘¿de quién?’. Fui a mirar y era una carta muy extraña, la forma en que estaba escrita, con mucha falta de ortografía, con ropa interior. Todo extraño.
«Se siguió repitiendo. Yo estaba en TVN y ‘oiga, le dejaron cosas’. Yo decía ‘qué miedo que se aparezca en un estacionamiento y uno está sola’. Da miedo.
«Tuve que ir a la Fiscalía, se empezó una investigación y, a raíz de eso, se acerca uno de los familiares, que tenía relación con la política. Me llama por teléfono y me explica que esta persona que se había obsesionado conmigo era familia de él, que tenía una enfermedad, esquizofrenia. Que no me preocupara porque no me iba a molestar más porque se lo iban a llevar a otro país.
«Fue bien grave, porque en algún momento lo llevaron a Primer Plano, lo entrevistaron, hablaba que estaba enamorado de mí y por qué me perseguía. Me dio mucho miedo.
«Porque si queda en eso nomás, en ‘estoy enamorado de ella, la admiro’, no pasa nada. ¿Pero qué pasa si aparece en un lugar donde estoy sola?. Y uno no sabe lo que te puede hacer o lo que puede pasar.
«Llegó a la universidad a buscarme, y me dijeron de la universidad ‘hay un tipo medio extraño que te está esperando afuera y pregunta por ti’. Menos mal que no lo dejaron entrar.
«Venía en una moto. Llegó Carabineros y él no tenía los papeles de la moto y estaba en una actitud extraña porque alumno no era, me estaba esperando a mí. Me preguntaron si lo conocía y expliqué la situación. Se lo llevaron detenido.
«Me empecé a perseguir, porque en TVN, en los desfiles que hacía, incluso en Viña, en la universidad. Y gracias a Dios que no llegó a mi casa».
