2096242.jpg

Pituca Sin Lucas comienza a preparar su recta final

Autor: admin_copesa / 2 abril, 2015

Las “pitucas” volverán a tener “lucas”. Con ese giro de la historia, Mega da inicio a la etapa final de la exitosa teleserie vespertina. Desde su estreno, el pasado 13 de octubre, la ficción ha liderado el rating con un promedio de 33.5 puntos y en distintas ocasiones se ha posicionado como el programa más visto del día, con peaks de sintonía de hasta 39.7 puntos.

 

El giro de la trama comenzó a tomar forma cuando José Antonio (Mauricio Pesutic) -el esposo de Tichi (Paola Volpato) y el que provocó que la familia tuviera que cambiar de vida- emprendió un exitoso negocio ligado a la minería que le devolvió el estatus de ABC1. Como parte de su estrategia por reconquistar a su esposa, prepara una sorpresa por su cumpleaños: el regreso de la familia a La Dehesa.

 

El éxito de la teleserie no es casual para su guionista Elena Muñoz, quien define a la vespertina como una comedia romántica que tiene la virtud de ser muy tierna, pero al mismo tiempo parodiar el día a día de todos los chilenos. “En un mundo tan estresante como el actual, Pituca es una especie de recreo, en el que la gente tiene la oportunidad de distenderse y compartir en familia con temas que son transversales”, afirma la guionista.

 

“Lita por ejemplo, es la caricaturización de señoras antiguas, conservadoras y clasistas, pero no es mala. Tiene otros valores que la hacen un personaje súper querible”, dice Muñoz.

 

En esta última etapa y con la posible partida de Tichi y sus hijas a La Dehesa, lo que se pone en conflicto son las historias de amor, que para Muñoz son claves en el éxito de la teleserie. “Acá se juega con el amor en distintas edades, que además pasan por distintos momentos todo el tiempo. Por ejemplo, cuando la Jesús está muy mal con Salvador, al mismo tiempo la Belén está muy bien con Fidel. La clave está en eso: que la gente no tiene que esperar hasta el final para dejar de sufrir y vivir dos capítulos de felicidad. Quisimos evitarlo y producir esta especie de equilibrio donde el amor se vive de manera constante”.