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Desclasifican cómo eligen a los famosos para los eventos top y a quiénes evitan

Autor: admin_copesa / 5 abril, 2015

Los eventos son furor. Más que nunca. El verdadero centro de las figuras del espectáculo, farándula, moda y estilo. Es un fenómeno similar al de las teleseries turcas en la televisión. Hay todos los días y gente como Vesta Lugg, la rubia de Chilevisión, puede recibir hasta ocho invitaciones a la semana –MIRE ACA UN COMPLETO INFORME DE GLAMORAMA-. Pero no todos están invitados.

 

Los de hoy son completamente diferentes a los descritos en el libro El Evento por la recordada cronista social “Totó” Romero y la periodista Ximena Torres. En 25 años la cosa cambió. Hoy son las agencias de comunicaciones y relaciones públicas las que analizan, seleccionan y se encargan de fichar a los “rostros” para cócteles, fiestas, desayunos, desfiles, conciertos, reuniones y ágapes de todo tipo, de acuerdo a lo que quiera la marca o empresa que organiza y paga la cuenta –VEA ACA CUANTO LE PAGAN A ALGUNOS POR ASISTIR-.

 

“Somos un termómetro de quienes están hot. Depende el tipo de evento que sea y de la marca, uno busca rostros”, cuenta Pablo Courard, director ejecutivo de Alta Comunicación, una de las agencias más poderosas. “Hay marcas que les gusta asociarse a gente famosa, y otras que prefieren nombres influyentes en ciertos nichos”, afirma.

 

El ejecutivo dice que “para un nicho ABC1 hay varias celebridades que calzan con ese perfil. Si es un evento súper masivo, buscas un personaje que tenga una penetración en televisión potente, y también hay marcas que la juegan por gente nueva”.

 

Raimundo Encina, director de Grupo Encina, detalla: “Por ejemplo, cuando hacemos los eventos de (la importante marca argentina de zapatos) Ricky Zarkany tenemos que invitar full glamour. Ahí tienes que saber a quién puedes invitar y a quién no. Tiene que ver con los objetivos del cliente. Si haces un desfile pituco, tu cliente no va a querer que estén todos los de chicos reality en primera fila, sino que asistan la Cata Pulido o la Javiera Acevedo”.

 

Mientras que Ras Silva, director de la agencia Largavista, ahonda en un factor fundamental en los eventos de hoy: los rostros con muchos seguidores en las redes sociales la llevan. “Están quienes no son tan famosos, pero sí muy conocidos en las redes sociales. Son personajes que incluso pueden cobrar por asistir”, señala.

 

Encina va incluso más allá. “Hoy un rostro que no tenga una red social potente está en desventaja, a no ser que sea la Cecilia Bolocco. Los famosos han descubierto el poder de las redes sociales, que están súper potentes, especialmente en Instagram, y claramente están siendo regaloneados por un montón de marcas que les dan canje o viajes a cambio de una viralización. Que una chica que tiene 200 mil seguidores en Instagram nombre una marca es espectacular”.

 

Hay un mínimo porcentaje de celebridades chilenas que, por más que la inviten, no van. “Son los que tienen contratos publicitarios con exclusividad. Son súper reconocidos y asistir a un evento no les suma ni les resta en sus carreras. Pero sí hay otros a los que les sirve mucho para estar más en la palestra y generar nuevos contratos”, comenta Courard.

 

Mientras que también están los que nunca serán invitados. «A la mayoría de las marcas no les gusta los rostros que se han metido en escándalos últimamente», cuenta Encina.