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Tonka relata su mágico momento con el «Tata» Díaz minutos antes de morir

Autor: admin_copesa / 13 mayo, 2015

Figuras del Buenos Días a Todos mantuvieron reserva ayer, luego de la muerte de Juan Carlos «Tata» Díaz, histórico editor general del matinal Buenos Días a Todos -MIRE AQUI LA TRISTE NOTICIA-.

 

Karen Doggenweiler, que trabajó con el Tata Díaz por más de 20 años; Julián Elfenbein, que creció cerca del editor periodístico en TVN; o Jordi Castell, que compartió en el periodista en el último tiempo, prefirieron guardar silencio ante las consultas periodísticas.

 

Tonka Tomicic, la animadora de Bienvenidos, en Canal 13, tenía algo importante que contar. Primero se despidió a través de su cuenta Twitter @TonkaTP, con los siguientes mensajes:

 

«Juan Carlos Tata querido! Sólo hace un momento estaba tomando tu mano dándote las gracias por q me formaste y luego me entero de tu partida».

 

«Tata adiós! Negrita y familia mi corazón con ustedes, se va un gran hombre íntegro, fuerte y formador de profesionales no habrá otro igual».

 

Luego contó en un diario que compartió que estuvo con Díaz minutos antes de su deceso. Y esta mañana en Bienvenidos profundizó en esa potente experiencia. Este fue su relato:

 

Tonka Tomicic: “Son cosas que pasan y que las maneja Dios. Recibo un mensaje de Carola Uruburu. Me dice ‘Tonka, el Tata está súper mal’. Yo no sabía, porque ese lunes no pudimos hablar con Carola Román, nuestra editora. Por esas cosas de la vida, no nos encontramos, y me lo iba a contar. Y me había dicho que quería verme y que estaba muy mal. 

 

«Su señora le dijo a Carola que me avisara. Y esas cosas que yo empecé a llamarla, llamarla, llamarla, a la ‘Negrita’, la señora del Tata, porque quería ir a verlo. Me dijo ‘no creo que te contesté, porque está en la UCI’. Hasta que me contestó, estábamos ayer en un video, y me dijo ‘ven, porque está mal’.

 

“Después de pauta fui, estuve un buen rato con ellos, con él, y claro, no estaba consciente. Estaba con su hija y con la ‘Negra’, su señora. Y pude darle las gracias y hablarle. Los doctores decía que había que hablarle, porque escuchaba, y estuve harto rato con él, y alcancé no a despedirme, porque pensaba volver el jueves o el viernes porque, como no había estado tan presente, sentía que tenía que recuperar el tiempo. 

 

«Y le digo ‘vuelvo el jueves o el viernes a verte, un ratito, a la hora de almuerzo’. Y bajamos con la ‘Negra’ y me fui poh. Llegué a la casa y al rato me dicen ‘falleció’. Ayer, en el velorio, me dice su señora ‘Tonka, bajamos, te fuiste y a los 10 minutos él se fue’”.


Martín Cárcamo: “Llegaste justo. Es impresionante”.

 

Tomicic: “Sí, y lo comentamos, porque nunca me había pasado. Fue tan especial. Sabes que venía con las manos así de heladas, las puse en sus brazos harto rato, y él me dio calor. Me dio temperatura. Yo pensaba ‘el Tata está mal. Está, a lo mejor, en sus últimos días’. 

 

«Qué increíble que un hombre con mucha fuerza, energía, apegado a la tierra, a las cosas ricas, sibarita, a la comida, a pasarlo bien, y me haya dado calor. Me calentó las manos todo el rato. Me dio la temperatura.

 

«Yo dije ‘qué fuerte, cómo una persona que se está yendo pueda tener esa energía’. En mi vida me había pasado una cosa así. Me fui y le digo a la negra ‘qué tranquilo está el Tata’. Lo siento tranquilo. Y me dijo ‘sí, ahora está tranquilo’. Y al ratito ya se fue.

 

“Exigente en el trabajo. Los garabatos que podían llegarle a alguien por no hacer bien la pega eran importantes. Era parte de su sello. Y eso mismo era parte de que formara tantos profesionales. Pero también súper emotivo y, en el último tiempo, mucho más.

 

“Su vida fue el Buenos Días a Todos. Su vida, su alma, su pasión, hasta el último minuto. Después del trasplante, seguía trabajando. Exigente. Bueno para comer, uf, ¡nunca había conocido una persona que pudiera comer tanto! ¡Plato tras plato!

 

“Me acuerdo cuando entré a trabajar al programa, iba por un reemplazo a la Karen (Doggenweiler). Entonces, le dije ‘dime tres cosas malas de todos los días’, como yo no tenía idea del trabajo que se estaba haciendo. Pero todos los días, sistemáticamente, me decía ‘esto, esto y esto’, y te va formando y moldeando. Claro, conmigo era más cariñoso, pero con los hombres les pegaba el chicotazo. Bravo”.

 

Polo Ramírez: “Probablemente, fuiste la última persona en verlo…».

 

Tomicic: “Así me dijo la ‘Negrita’. Estaba emocionada, pero no tenía tristeza, tenía tanta tranquilidad. El dio una lucha tan grande, tan importante, no solamente él, sino que su familia. Y cuando hay una enfermedad así de potente, sufren todos, pero yo sentí que había tranquilidad. Se estaba despidiendo.

 

“Hizo tantas cosas el Tata. Sabía tanto. Y bueno, nosotros tenemos a una de sus principales herederas, Carola Román, nuestra editora. Así que tenemos un pedacito de él aquí en Bienvenidos”.