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El ataque de furia del participante vapuleado en estreno de MasterChef Chile 2

Autor: admin_copesa / 21 octubre, 2015

Fue la polémica en el estreno de la segunda temporada de MasterChef Chile. Felipe Coya, un empresario gastronómico, quiso sorprender al jurado del programa con unos sushis criollos. Se presentó con una polera sin mangas y, por el nerviosismo, quedó todo sudado. El resultado fue desastroso. Los chefs barrieron con su plato e higiene. 

 

“¡Nica voy a probar esa huea! Primero me da asco la manera que te presentaste a nosotros para cocinar. Tu plato con tus dedos, las fritura, el sudor que inspiras, me da aún más asco”, le dijo Yann Yvin. Luego, le botaron sus sushis criollos a la basura. El concursante, opacado, se tuvo que ir eliminado y con el ánimo por los suelos.  -MIRA EL VIDEO EN EL MINUTO 19- 

 

Y Coya está furioso con el trato del jurado. El empresario mostró toda su molestia con lo que vivió en MasterChef en conversación con SQP. Se excusó de los “errores que cometió” y terminó por desafiar con un plato gastronómico a los mismos chef que lo criticaron este domingo.“Que se compre una chaqueta de cocina. Después podemos hablar de cocinero a cocinero”, le respondió Yann Yvin. Esto fue lo que dijo el concursante:

 

Felipe Coya: “La verdad es que tuve sensaciones encontradas, porque quedé seleccionado entre 300 y tantas personas, y estar dentro de los 40 mejores cocineros de Chile es un logro. Te produce alegría obviamente. Por otro lado, en verdad, el trato y la forma que se llevó, por lo menos en mi participación, no fue la correcta, no fue la mejor. A lo mejor se cometieron errores, sí sin duda, producto del nerviosismo, de muchos factores. Creo que no fue la forma y no corresponde el trato hacia mí, hacia nadie la verdad.

 

“La cocina es un arte y como arte tiene que respetarse y tiene que mirarse con altura de miras. Y los jueces tienen que saber que cada una de las personas que participamos ahí, nos dimos un tiempo, dimos lo mejor de nosotros para preparar un plato. Estuvimos más de 50 minutos cocinando, para después montarlo en 5 minutos. La verdad es que es un trabajo y ese trabajo se tiene que respetar.

 

“Lo encuentro como un poquito soberbia de su lado. Creo que está bien que se disfracen. Está bien que tengan una maqueta y una pauta del programa, pero no se puede pasar a llevar a la gente y no se pueden trasquilar valores, por una pauta y una maqueta de un programa.

 

“Estoy consciente de que se cometieron errores producto de muchos factores. Algunos inclusive pueden ser inducidos, porque el aceite, ponte tú, yo lo llevaba hirviendo. Nosotros tenemos 50 minutos para cocinar el plato y después lo llevan a otro sector donde están los jueces. Y en ese momento tenemos que montar el plato. Yo tomé las precauciones del caso y me llevé el aceite, pensando en hacer el tema perfecto. Que los tipos comieran el plato caliente, como corresponde y, por tratar de buscar esa perfección, salí trasquilado.

 

“Insisto. Se cometieron errores, sí. A lo mejor la presentación también pudo haber influido. Ojo que, en el tema de la presentación, también me dejé guiar. Hubo personas que me asesoraron y me dijeron ‘no yo creo que tienes que ir así y asá’. Y después de un día a otro, como que no se reconozca eso, me parece un poquito doble estándar. Entiendo y sé que es parte del show televisivo. Lo que no comparto es la forma, de hecho ahora mismo he visto las redes sociales y mucha gente que ni conozco que también está apoyando el caso.

 

“Ya que son tan buenos cocineros, ya que están tan seguros de que ellos tienen las aptitudes para poder calificar, les digo que hagan su mejor plato, que cada uno de los tres, el francés, el italiano, el chileno, hagan sus platos, qué se yo. El mejor plato que puedan. Ojalá el mejor plato que puedan. Yo voy a llevar el mío. Ojalá que vayamos al paseo de armas, a la Plaza de Armas, a Huérfanos, a Estado y que la gente elija. Pongamos los platitos ahí y que la gente vaya, los pruebe y que la gente, sin saber, elija. Estoy seguro que les ganó por lejos”.

 

Esta fue la respuesta del chef Yann Yvin a SQP:

 

Yann Yvin: “¿Qué? ¿Quieres que además lo comamos? No. Hay que poner un límite a la cosa. Sí el gallo no fue capaz de respetar ni siquiera el producto, como siempre. Eso me calienta, que la gente no respete el producto. Estamos obligados de botarlo por todo lo que pasó. Me enfurece eso, porque la comida no se bota, pero por culpa de él se botó.

 

“Voy  a mostrar el problema del otro lado. Para mí es una falta de respeto hacia nosotros. Cómo te puedes presentar a un concurso de cocina en el vestido que estaba. ¿Tú te vendrías a presentar, a buscar trabajo en un hotel, en una cocina así? ¿No? ¿Entonces por qué él lo hace? En un programa de televisión donde se habla de cocina, donde una de sus primeras reglas es la higiene ¿Viste a alguien trabajar con sus manos? Tampoco. Entonces el gallo viene con polera sin mangas. Todo transpirado, trabaja con la mano ¿Qué más? Es una falta de respeto de él hacía nosotros. Punto.

 

“No veo mucho el interés en desafiar. Primero que se compre una chaqueta de cocina. Después podemos hablar de cocinero a cocinero. Pero, ¿desafiar? No veo el interés ¿Para demostrar qué? Llevo 30 años cocinando. Él me hace un rolls de sushi de mierda ¿Qué más?”.