Pancha Merino destrozada! Lloró al revelar el duro drama tras su querella por millonaria estafa
“Jamás pensé que esta cuestión me podía pasar”, comentó Pancha Merino este miércoles en Bienvenidos. La actriz rompió el silencio y habló por primera vez de su querella por estafa y abuso por más de $ 230 millones contra los socios de su ex esposo, el ingeniero Claudio Labbé, en una empresa dedicada a productos agrícolas llamada Comercial South Farms Limitada. –VEA ACÁ TODOS LOS DETALLES DE LA QUERELLA DE PANCHA MERINO–
No fue fácil para Pancha. En el matinal de Canal 13 lloró desconsolada al revelar detalles del doloroso drama detrás de la querella. “Me sentía atropellada e injuriada”, contó. Además, relató los duros episodios que vivió cuando le embargaron bienes. “Me dejaron en el estacionamiento con mi guagua, la silla de mi guagua, y se llevaron mi auto. Y yo no les debo ningún peso. Ni uno”, dijo.
Pancha Merino: “Bueno, mira. Esto es un tema que yo llevo desde que mi guagua tenía un mes. Y que sucedió en una etapa súper frágil, que es cuando una mujer está embarazada, y embarazada de término. Yo, como buena actriz, siempre he sido como súper… Uno estudia teatro no para tener dinero. Para mí el dinero es súper energía. Todos saben que mi verdad va siempre ante cualquier contrato. Yo nunca he podido ser una persona que no soy. O sea, soy la que soy y así me he manejado. No voy por las conveniencias ni por buscar inconvenientes.
“Esto es un tema súper doloroso, el cual involucra a mi marido y a gente muy cercana y muy querida, que me la presentaron del día uno que conocí a mi ex marido. Aquí involucra a un amigo, que es el padrino, era el padrino de uno de mis hijos, y gente que yo quería mucho y que confiaba mucho.
“Corrijo: uno era amigo mío. El otro no era para nada amigo mío. Este es un tema al cual me voy a referir muy poco y que no quería que se hiciera público, porque esto entorpece una investigación. Esto está en manos del OS-9 de Carabineros, el cual ya ha hecho diligencias. Y que , confío, van a llegar a la verdad. Y en manos del fiscal, que tú tienes el nombre, que he sabido que es una persona muy justa. Y que confío que va a llegar a la verdad. Por lo tanto, no me quiero referir mucho al tema, porque no quiero entorpecer la investigación. Yo con este tema quiero llegar a la verdad.
“Mi ex marido tenía una empresa con esta gente, que se llamaba South Farms. Y después me achacaron deudas de esta otra empresa (Global Soluciones Financieras), ¡que yo nunca les he pedido plata! ¡Ni luca, ni cien pesos! Literalmente, ¡ni un peso! Y que hace dos años me han perseguido por deudas que yo no tengo con ellos.
“Los dueños son estos dos personajes, que yo no quiero nombrar, a quienes yo nunca le he pedido plata. Uno de ellos era gran amigo de mi marido”.
Scarleth Cárdenas: “¿Tú firmaste papeles?”
Merino: “Sí, porque yo, cada cierto tiempo, no era primera vez que yo ayudaba en operaciones de factoring a mi marido con esta empresa, ¿cachai? Y me dijo un día ‘fírmame estos papeles’”.
Cárdenas: “¿No los leíste?”
Merino: “No, no los leí, porque fue un día en la mañana. Yo ya estaba casi a punto de parir. Además que yo confié. ¿Cómo no voy a confiar? El padre de mis hijos y uno de ellos el padrino de un hijo. Además que se jactan de ser ultra exitosos, millonarios. O sea, ¿cómo iba a pensar que una pobre actriz, que ha trabajado desde los 17 años, 16 años, ellos se van a llevar…? ¿Me entendí? Es que no está en mis registros, ¿cachai?”
Tonka Tomicic: “Ellos parece que te había hecho firmar la venta de un terreno en Maitencillo”
Merino: “Claro. Y es ilógico, porque yo, dos meses después, me empecé a construir una casa que, incluso, lo hablé con ellos mismos, porque eran amigos que nos veíamos todos los fines de semana, en asados familiares. Mis niños son compañeros de sus niños. O sea, aquí involucra generaciones, no solamente nuestra generación, sino que la generación de mis niños.
“Yo lo quiero tomar como budista que soy. Esto es algo de que yo tengo que aprender. No me queda otra que asumir. Que involucra muchos afectos, pero que yo, ya internamente, lo tengo muy asumido. Que llevo dos años llorando. El primer año estuve llorando en shock, sin poderlo creer. Después empecé a ser perseguida por causas civiles.
“Llegaron a mi casa cuando mi papá estaba agonizando (comienza a llorar), cinco Carabineros y un receptor judicial. El otro día salí con mi guagua de cuatro meses del supermercado y me llamaron (Tonka se acerca a consolarla) a mi teléfono cuando estaba en el supermercado. Y me dijeron que había cuatro Carabineros en mi auto y que lo tenían que embargar. Me dejaron en el estacionamiento con mi guagua, la silla de mi guagua, y se llevaron mi auto. Y yo no les debo ningún peso. Ni uno. A mí me persiguieron. Jamás pensé que esta cuestión me podía pasar”
Polo Ramírez: “Por qué te convirtieron a ti, porque en el fondo estas siendo la única víctima de todo esto, que no tenías ninguna responsabilidad”
Merino: “Porque soy la única que tengo activos. Mi marido no tiene activos. Entonces me persiguieron a mí por los activos por supuestas deudas que tiene mi marido con la sociedad esta de exportaciones”
Pancho Saavedra: “Tú dijiste que has llorado durante dos años. Rabia, dolor. Hoy día, ¿por qué lloras?”
Merino: “Hoy día ya estoy en el perdón”
Tonka: “¿Ya perdonaste?”
Merino: “Sí. Quiero justicia nomás. Quiero la verdad. No quiero venganza. El perdón es un proceso largo. Igual no te digo que caigo como ‘¡oh, qué rabia, que caigan, que se haga justicia!’. Eso me envenena a mí, ¿cachai? Y una persona, a la cual confío mucho espiritualmente, me dijo algo súper cierto: ‘Ellos te pueden robar dinero, pero tu alma no te la pueden robar, Francisca’. Y yo no voy a dejar que me roben mi alma. Es por eso que quiero perdonarlos.
“He pasado por varios estados de angustia, de mucha ansiedad. Yo quiero confiar en la justicia chilena. Quiero confiar que ellos van a investigar y van a hacer su trabajo. Yo solo busco la verdad. Yo estoy súper tranquila con mi conciencia. Yo he hecho hasta un mea culpa. Y mi mea culpa es haber confiado ciegamente. Y eso. Quiero tener paciencia, trabajar la paciencia.
“Lamentablemente fue. No me queda otra que seguir viviendo. De repente los planes que tienes con tu propia vida no se dan.
“Ustedes siempre lo supieron. Y estoy súper agradecida. Es rico levantarse y hacer lo que a uno le gusta. Yo trabajo de los 16 años. Me encanta trabajar. Trabajaría aunque no lo necesitara. Me encanta levantarme todos los días por algo. Este año me hubiera gustado haber dado más de lo que he dado. Pero de repente, mis estados anímicos no me lo han permitido. Y siento que este equipo ha sido súper contenedor y generoso en ese aspecto”
Pancho Saavedra: “Pancha, ¿cómo proteges a tus hijos de esta situación? Porque tú eres, de alguna manera, pública, la gente te conoce. ¿Qué pasa con ellos, que están en el colegio?”
Merino: “Gracias a Dios mis hijos tienen una súper buena contención en el colegio. Tiene una súper linda red de amigos, que ellos mismos han hecho. La única forma de contenerlos es yo sanándome, no llenándome de venenos. Por eso también me he apegado más a una visión espiritual que siempre he seguido, que es el budismo, donde no me puedo envenenar con rabia, con odio, con sed de venganza. Y lo vuelvo a repetir. Aunque parezca súper básico, te va ayudando. Estoy más confiada de que la justicia va a llegar a la verdad”
Tonka: “¿Cuándo te diste cuenta que estaba pasando?”
Merino: “Yo empecé a construir mi casa. Ya estaba casi terminada. Y de repente mi ex marido me contó la verdad, que había prendado el sitio. Que se iban a llevar el sitio. El sitio era mío. Resulta que se estaba arrendando por esta gente. Yo me puse a hacer una casa en un sitio que no era mío. Entonces, yo no entendía. Hablé con mi amigo, que es el dueño de esta empresa.
«‘¿Pero cómo?’. Y me dijo ‘te voy a ayudar’. ‘¿Pero cómo me van a hacer esto? Yo estoy sola, mis papás son viejos’. Me mostré súper débil. ‘Tengo una guagua chica. Por favor, ayúdame’, obviamente pensando que esta persona, el amigo de mi marido, me iba a ayudar. Además que es un gallo ultra exitoso, con una fortuna. La verdad es que uno cree que, mostrándose frágil, como uno está. Pero peor. Fue lo contrario. Fue abuso. Y al darme cuenta de ese abuso, después de mucho tiempo, después que me persiguieron, me quitaron el auto, como si yo les debiera, tomé fuerza. Me vino la rabia, porque al principio tuve mucha pena y miedo, pena y miedo. Me vino la rabia y…”
Tonka: “¿Y quién te acompañó?”
Merino: “Mi mamá”
Tonka: “Pero falta eso, sobre todo cuando estamos hablando de plata, negocios. No quiero decir que las mujeres no estamos preparadas para eso, pero hace falta eso. Ahí, ¿en quién te apoyaste?”
Merino: “En mi mamá (llora). Y en muchos amigos, que la verdad se portaron increíble. La verdad es que tengo súper buenos amigos”
Tonka: “¿Qué te dijo tú mamá?”
Merino: “Mi mamá, triste, porque le encantaba verme feliz. No sé. Pero bueno. ¿Sabí qué? Hay tanto dolor que igual soy una agradecida de la vida. Mis hijos están bien. Yo estoy bien. A mí la plata no me va ni me viene. Yo solamente me sentía atropellada e injuriada. Y eso quiero. La verdad nomás. Nada más. Justicia”.
