Martín Cárcamo reveló qué le dijo Bonvallet tras la ruda pelea con Giorgio Jackson en Vértigo
Eduardo Bonvallet era frontal. Y no dudó en encarar al diputado Giorgio Jackson, en una ruda discusión ocurrida en Vértigo en mayo de 2015.
Hasta Cecilia Bolocco -que entonces reemplazaba a su hermana Diana- se puso de pie y trató de calmarlo calmarlo. Pero “el gurú” no entendía. Le dio con todo al parlamentario de Revolución Democrática.
¿La causa? La dieta parlamentaria que Jackson recibe en el Congreso. “Déjate de mentir, bájate el sueldo y dónalo. Cuando estuve en Radio Zero ganaba $10 millones y entregaba la mitad… ¿Cuántos sueldos mínimos son $9 millones?”, le dijo el fallecido comentarista deportivo –MIRE ACÁ EL DIÁLOGO CON LA VIOLENTA DISCUSIÓN ENTRE JACKSON Y BONVALLET–.
A más de un año de aquel round, donde incluso se temió por la salud de Bonvallet -ACÁ DETALLES DEL BACKSTAGE DE LA PELEA-, Martín Cárcamo desclasificó la trastienda. El animador aprovechó el momento en que hablaban de la entrevista que la viuda del “Gurú” dio para la revista Sábado para entregar detalles de lo que le dijo Eduardo tras la pelea:
Cárcamo: “Me acuerdo la última vez que vino a Vértigo. Y se agarró con Giorgio Jackson. ¿Y por qué me acuerdo? Porque él, en un Vértigo anterior, le contaron un tema que había dicho Caszely. Y te acuerdas que me increpó a mí por Twitter. Entonces yo no enganché. Dije ‘le tienen que haber contado esto, se enojó’. No enganché con el tema.
“Y un año después me encontré con él en Vértigo. Había pedido camarín solo. Lo fui a saludar, antes de partir el programa. Yo igual iba medio… Abro la puerta, estaba Eduardo fumándose un cigarro. Y le digo ‘¿cómo estai?’. ‘Bien poh. Gracias por la invitación. ¿Cómo estai poh, Cárcamo? Te pedí perdón’. Me pidió perdón después. ‘Sabí que nunca pido perdón. Pero tenía que pedirte perdón, porque me equivoqué’.
“Y después ocurre la cuestión de Giorgio Jackson, que lo increpa, le dice que él no sabe nada de política, por su historia, en el estilo de Eduardo. Vamos a comerciales. Y yo, muy urgido, me acerco a Giorgio Jackson y le digo ‘¿estás bien?’. ‘Sí, todo bien’. Voy donde Bonvallet, que estaba muy alterado, al aire, y ahí te das cuenta de cómo manejaba las cosas. Me acerco y le digo ‘Eduardo, ¿todo bien?’. ‘Sí poh. ¿Y cómo va la sintonía?’. Me tira la talla. Y yo digo ‘¿cómo sabe en qué minuto decir las cosas y no decir las cosas?’. Fue como los momentos tensos del programa. Y que quedan en el recuerdo de la gente”
