La dura reacción de la doctora Cordero frente al descontrolado llanto de la «Jei Lo» Nicole Pérez
Nadie había llorando tanto y tan descontroladamente en Primer Plano como Nicole Pérez. El viernes la conocida intérprete de los personajes Doctora Cahuín y la Jei Lo, de los recordados programas juveniles Mekano y Yingo, casi se quedó sin lágrimas al contar su viaje de un año y medio a Estados Unidos persiguiendo el llamado «sueño americano».
Tras hacerse cristiana hace dos años y una participación en el reality Amor a Prueba, de Mega, vendió todo y se fue a Connecticut junto a su marido, sus dos hijos -la mayor tiene 11 once años-, su mamá, sus perros, sin papeles y el plan de comenzar un negocio de detailing. Es decir, el proceso con máquinas de vapor que limpia y renueva la superficie de vehículos.
Sin embargo, allá se encontraron con un súper frío invierno y otras dificultades que les frustraron sus deseos. Nicole y su marido terminaron haciendo aseo en una clínica durante diez meses, incluido limpiar los water. Finalmente debieron regresar a Chile. Actualmente la familia vive en la casa de una cuñada y Nicole comienza el 16 febrero a impartir un taller de trapillo. Las cosas están difíciles.
Pérez realizó una nota previa para Primer Plano y luego estuvo en el estudio. Tanto en el reportaje previo como en la entrevista en el set lloró desconsoladamente. Con lágrimas a raudales. Los animadores, Julio César Rodríguez y Fran García-Huidobro, y la panelista Pamela Jiles fueron muy empáticos.
En tanto, la siquiatra María Luisa Cordero hizo referencia a las «personalidades infantiles», como supuestamente sería la de Pérez –MIRE AQUI EL VIDEO. PARTE 3-. Entonces, Rodríguez le hizo notar el «tono» en que lo dijo. Esto fue lo que pasó en el estelar de farándula de Chilevisión:
Julio César Rodríguez: “La sensibilidad que está a flor de piel ahí ¿qué la gatilla?”
Nicole Pérez: “Bueno, la verdad, es como… Es que yo soy tan llorona”
Cordero: “Eso se llama la labilidad emocional. Es una característica de las personalidades infantiles”
Fran García-Huidobro: “¿Pero positiva doctora? Que no sea capaz de…”
Cordero: “No poh, no es positivo, porque ella tiene una gran entereza, por la historia que escuchamos. Sin embargo, yo creo que todavía no se ha perdonado que limpió waters con caca gringa. No se lo ha perdonado… Porque cada vez que se acuerda del wáter se pone a llorar”
Pérez: “No, yo creo que tengo el lagrimón muy sensible, no lo sé, pero…”
Cordero: “No. Las lágrimas no vienen de los lagrimales, vienen de las emociones”
Pérez: “Está bien, pero…”
Rodríguez: “Pero no todas las personas puedes reaccionar como usted quiere que reaccionen, poh, doctora”
Cordero: “¡Yo estoy describiendo un hecho!”
Rodríguez: “Por eso, poh”
Cordero: “Si ella llora las 24 horas al día si puede. Yo tengo que trabajar entremedio, así es que no podría llorar tanto”
García-Huidobro: “Pero preguntémosle a ella primero, doctora, por qué la invaden en estas emociones”
Cordero: “Yo estoy tratando de enseñarle a la gente a que reconozca sus emociones. Nada más”
García-Huidobro: “Muchas gracias”
Cordero: “No estoy diciendo pesadeces, nada”
Rodríguez: “Quizás el tono”
Pérez: “No, si está bien
Cordero: “Ah, tú tienes la labilidad emocional (lo repite en tono súper irónico)”
Pérez: “Sí, yo sé. Eso lo tengo que manejar…”
Cordero: “¿Le gustó don ‘Julai’?»
Rodríguez: “Tampoco doctora”
Cordero: “¡Ándate al diablo entonces!” (Risas en el estudio).