El angustiante episodio de Pancho Saavedra en el debut de su nuevo programa Contra Viento y Marea
Después de muchas grabaciones, muchos preparativos, está todo listo para el matrimonio. Todos los invitados arreglados, el novio, Pancho Saavedra, pero la novia no aparece. Pasan los minutos, cunde el pánico y Pancho está desesperado.
El animador más querido de la televisión chilena vivió el clásico momento en que todos esperan a una novia que se demora y demora, en el primer capítulo de Contra Viento y Marea. Este es el esperado programa sobre amores y matrimonios, que parte este lunes a las 22.30 horas, en Canal 13.
Contra Viento y Marea es una montaña rusa de emociones con parejas de diferentes ámbitos y estilos rumbo al altar.
Saavedra viaja por estas experiencias con la humanidad y espontaneidad que demuestra en Lugares Que Hablan, el programa revelación del último año y que tiene a su anfitrión en el tope de todos los rankings.
“A mí me dio mucha angustia, porque las novias tienen la mala costumbre de atrasarse. De repente yo veo novias que salen cinco para las seis de la tarde de su casa y a las seis es la ceremonia. Entonces, esto del mito de que la novia tiene que llegar atrasada, no es así», comenta Saaavedra a Glamorama sobre el caso en cuestión, protagonizado por un novio que sufre acondroplasia y su pareja.
«Hay pastores evangélicos, curas de la iglesia Católica, jueces del Registro Civil que tienen horas. Y si una ceremonia se atrasa, atrasa el resto de las ceremonias”, agrega.
En tanto, estos son algunos de los planteamientos del hombre ancla sobre el nuevo y prometedor espacio:
Pancho Saavedra: “Cuando la gente no tiene ganas de luchar ni de pelear, como que esto te inspira, es como tu arma. Te remece en la situación de comodidad que está uno. Pelear por la camisa arrugada o por la toalla son estupideces. Aquí hay cosas reales y profundas que están pasando.
«Nos metemos en el mundo más intimo de las parejas y es tremendamente divertido, porque ellos son capaces de reírse de sí mismo. Es dramático cuando uno compara las realidades de un con las de otros. Te hacen reír o llorar y los terminas queriendo así.
“Frente a una industria tan competitiva, valoro a los canales que se atreven a hacer algo distinto. Aquí no estoy esperando resultados de rating. No espero eso, porque el escenario es competitivo, pero sí puedo decir que tengo fe que la gente lo va a ver. Es un programa que le va a hacer bien a la gente, te vas a reír, disfrutar y al otro día te vas a levantar con el pie derecho”.
