Glamorama
Renata Bravo sufrió la muerte de su padre justo cuando estaba de vacaciones en Panamá. IMAGEN TOMADA DE PANTALLA / LA RED

El dramático relato de Renata Bravo sobre la muerte de su papá mientras ella vacacionaba en Panamá

Autor: C. Z. / 17 enero, 2018

Renata Bravo estaba empezando sus vacaciones junto a su familia en Panamá cuando recibe una terrible noticia. Desde España sus hermanos le comunicaron que su papá había sufrido un violento accidente en moto. Estaba grave. La actriz tomó una fuerte decisión. Dejó a su esposo e hijas y partió lo más rápido posible al país ibérico. Al llegar, su padre había muerto.

Esto fue parte del relato que Renata hizo en Hola Chile. Los hechos ocurrieron hace una semana y Bravo contó lo difícil que fue el proceso tras recibir la noticia. Su padre vivía en España junto a sus hermanos y no lo había visto hace mucho tiempo. Así fue su relato en el matinal de La Red:

Renata Bravo: “Cuando yo llego a Panamá, mi papá había tenido un accidente en moto. Entonces me dice que estaba vivo, pero muy mal. Mi marido me dice ‘ándate a España’. Y yo cómo me iba a ir y a dejar a mis hijas y mi marido. Imagínate. Era terrible esa decisión.

“Le pregunto en el chat a mis hermanos qué hago. Me dicen ‘tranquila, no tení nada que venir a hacer’. Pero mi corazón necesitaba estar allá. Mi marido me insistía. ‘Ándate, ándate’. Imagínate comprar un pasaje para el mismo día. Es prácticamente imposible. Yo con short y hawaiana y allá en pleno invierno. Fue heavy, fue heavy todo lo que viví.

“Por suerte encontramos, y es un milagro de la vida, porque comprar un pasaje al mismo día a España, me imagino que debe ser, además de difícil, una millonada de plata. Entre que marcaba botones desde un lobby de un hotel, con los nervios que tenía, sin tener un computador y solo con mi teléfono, mi marido que me prestaba la tarjeta, porque hice todo mal, porque cuando fui para allá no activé mi tarjeta de crédito, y mi marido me prestó su tarjeta. De repente había un cupo en el avión, uno, y a un precio normal. Y me decía ‘apúrese, porque en seis horas tiene que estar en el avión’. Y yo estaba a tres horas del aeropuerto. Me tenía que ir ahora.

“Y yo ‘¿qué hago, qué hago? ¡Y pah! Mi marido lo compró. Ahí fui a buscar mis cosas y me fui. Cuando me subí al avión, yo no sabía qué iba a pasar con mi papá. Sabía que estaba grave.

“Yo, hoy en día, amo más que ayer al ‘Alpaca’ (apodo de su esposo). Yo creo que en estas cosas se ve a la persona que tiene al lado de uno. Porque el amor no es pasarlo bien, hacer el amor, no es chupar, compartir los buenos momentos de la vida. Yo creo que en estos momentos es cuando uno dice ‘puta que vale la persona que tengo al lado’. Y él es mi compañero, porque si hubiera pasado al revés, me cuesta decirlo, pero me hubiera costado un mundo quedarme sola con mis hijas en Panamá. Me hubiera muerto de miedo.

“Pensaba cómo el ‘Alpaca’ iba al baño, con dos niñas chicas y en un país donde no podías dejar a niños solos ni un segundo, porque les puede pasar cualquier cosa. Yo no pensé en eso. Pensé en mí, en mi familia y en mi papá. Y me fui. Me dijo ‘ándate, Rena’.

“Mis hijas pasaron mucha pena cuando les dije que me iba. Les conté por qué. También es difícil. Es doble pena. La mamá se va de estas vacaciones que habíamos preparado con tanta ilusión. Estábamos llegando y la mamá se va. Imagínate eso. ‘¿Por qué te vas, mamá?’. La chica tiene tres y la grande siete. A ellas se les había muerto un perrito en Arica. Habíamos hecho una ceremonia por la muerte. Ellas lloraron mucho. Les dijimos que el Bartolo estaba muy mal y qué bueno que se lo había llevado Diosito. Entonces ahora hice lo mismo. ‘¿Se acuerdan del Bartolo, que estaba enfermo?’.

“Viajé trece horas en ese avión sin saber a lo que iba. Y cuando se abre esa puerta en el aeropuerto, me encuentro con esta maravillosa sorpresa que estaban todos. Y bueno, ahí me dicen que el papá había fallecido”.