«Una mujer me dijo: ‘mi esposo dura tres minutos, ¿es precoz o no…?’: las confesiones de Japi Jane, la exitosa empresaria de juguetes sexuales
Un día Jane Morgan -una estadounidense criada a orillas del Mississippi que llegó a Santiago en 1999- fueron al centro de Santiago a comprar un juguete sexual, esperando encontrarse con una grata experiencia, tal como había sucedido en el extranjero. Pero fue desastroso.
Entonces la Ingeniera Comercial decidió crear Japi Jane, el emprendimiento de juguetes y artículos para divertirse y mejorar la sexualidad que se convirtió un éxito y la hizo famosa en Chile.
Este fin de semana Jane estuvo en La Divina Comida junto a Amaya Forch, Karim Butte y Agustín «Pastelito» Maluenda. En el programa de Chilevisión, Morgan contó los inicios de su próspero negocio:
Jane Morgan: “El cambio cultural en Chile es una de las razones por las que yo empecé Japi Jane»
Pastelito: “¿Cómo empieza Japi Jane?”
Jane: «Levando cinco años ya en Chile… Yo nunca había tenido un juguete sexual. Y cuando estuvimos en Estados Unidos pasamos a una tienda y yo muerta de vergüenza. Compramos un juguete que era muy bueno porque era alemán, bonita la caja, tenía carita de sonrisa y todo, ‘Paul’”
Amaya Forch: “¿Por qué te compraste a Paul?”
Jane: “Porque una pareja que lleva muchos años yo creo que va buscando cosas para entretenerse”
Forch: “¿Tú le dijiste a él: ‘quiero a Paul’?”
Jane: “No. El. Yo soy una inocente niña de colegio de monjas. No fue mi idea. Fue su idea. Como ‘compremos alguna cosita’. Entonces compramos a Paul. Nos gustó, divertido, dije ‘que buen aporte esto’. Entonces acá dijimos: ‘vamos al centro, a una tienda en Chile y compramos un amigo’. ¿Pero han ido alguna vez a estos sex shops del centro?”
Forch: “Sí”
Karim Butte: “O sea, son horribles”
Jane: “Al final eso nos pasó. Como que no se sentía la tienda con higiene, con un servicio ni nada, como la experiencia que tuvimos en Estados Unidos, que era agradable.
«Como soy ingeniera comercial, vi un nicho en el mercado que no estaba. Por eso lancé Japi Jane, un espacio más agradable para las mujeres y la pareja, inicialmente, y ahora para todos.
“A la semana ya me habían preguntado tantas cosas. Por ejemplo, una mujer me dijo: ‘mi esposo dura tres minutos, ¿es precoz o no?’, y yo no sabía la respuesta. Dije ‘déjame averiguar’. Y tantos ‘déjame averiguar’, que me fui a hacer mi diplomado en sexualidad humana, que no había, había como tres sexólogos.
“Me puse a estudiar, porque al final dejé de ser Jane y me convertí 100% en Japi, que es una persona que no solamente vende. De hecho, yo tenía pega, no necesitaba la plata, no emprendí para eso. Era como una misión social. En el camino fui haciéndolo más rentable” –MIRE AQUI EL VIDEO. MINUTO 01.06.00-.