Glamorama
Imagen publicada por Karen Bejarano en su Instagram @karenbejaranotv en marzo de 2019.

Karen Paola: «La gente me preguntaba por qué había dejado de cantar. Y te voy a ser súper honesta: a mí me mataron un poco la fe en mí…»

Autor: Fran Varela / 24 abril, 2020

«A mí me mataron un poco la fe en mí. Durante mucho tiempo como que dudaba si tenía talento o no», dijo Karen Paola sobre la razón de abandonar su carrera musical.

Karen Bejarano publicó tres discos. El primero, en 2003, obtuvo doble Disco de Platino y Oro. El último fue en 2008.

A partir del 2012 la cantante dio prioridad a su carrera de panelista televisiva.

Esta semana, en el programa El Aperitivo, que se transmite en vivo a través de Instagram, Bejarano cantó a capella y fue celebrada por el animador del espacio, Jordi Castell, y por los usuarios de la red social conectados a la transmisión.

Entonces, la figura televisiva explicó el por qué de su paréntesis musical de años:

Karen Paola: «La otra vez hice un live y la gente me preguntaba por qué había dejado de cantar. Y te voy a ser súper honesta: a mí me mataron un poco la fe en mí. Durante mucho tiempo como que dudaba si tenía talento o no.

“Te explico. Hubo tanta gente, durante mucho tiempo, que me decía que yo no cantaba, que mi voz la hacía otra persona, que yo no era cantante, que yo no le había ganado a nadie. Yo me empecé a creer toda esa crítica porque era muy cabra también.

“Ya en Mekano pasaba un poco, pero fue post. Y me empezó a dar tanto miedo, tanto terror enfrentarme al qué dirán, a lo que van a decir, a las críticas… Que me fui autoexiliando de la música sin que nadie me lo pidiera más que solamente por esta gente que solo tira odio a través de mensajes, de redes, de Twitter.

“Y durante mucho tiempo, como te decía, dudé de que existía ese talento y cada vez que iba a cantar yo sentía que me salía mal. Entonces me iba, me encerraba, me ponía mal. Tuve una depresión muy grande, no solamente a raíz de esto, sino de muchos temas que pasaron en mi vida.

“Y descubrí un día, con mi sicóloga, mi terapeuta, que me dijo ‘¿hay algo que tú extrañes?’, porque me puse a llorar a mares. ‘Sí, la confianza que tenía en mí antes de entrar a la televisión’. Y me dice ‘¿cómo?’. Sí poh. Porque tú me vez toda confiada y no me pasa nada. Pero la verdad es que estoy por dentro cagada de susto. Mucho miedo al qué dirán, mucho miedo a la crítica.

“Entonces, me dijo ‘volvamos a esa memoria emotiva, a cuando tú eras chica. Anda y conéctate cuando eras chica’. Y me hacía hacer ese ejercicio constantemente. De volver a conectarme conmigo, de verme en el living de la casa de mi abuelita disfrazada, porque yo me disfrazaba, me pintaba entera, me ponía todas las pulseras de mi mamá, los aros gigantes, las polleras, y las busas me las ataba. Les hacía show de flamenco, les cantaba, me creía Madonna.

“Ni mi mamá ni mi abuelita nunca dudaron de mí ni de donde iba a llegar. Pero yo empecé a dudar de mí y eso fue letal para mi carrera musical.

«Si me preguntas, esto es lo más honesta que he sido en mi vida con respecto a este tema, porque siempre la gente me preguntaba ‘Karen, ¿por qué no estás en la música?’. ‘Es que no tengo tiempo’. Y era mentira. Uno siempre puede hacerse el tiempo. No es tiempo lo que me faltaba. Era confianza».