Lorena Bosch sobre la crisis del medio actoral: «Fue súper doloroso ver un piso completo, donde había gente con la que llevaba años trabajando, y estaban todas esas oficinas vacías…»
«Hace un rato largo que la televisión viene en una crisis. Las áreas de ficción nos hemos visto súper golpeadas con eso», dice Lorena Bosch.
La actriz de 41 años que se hizo conocida por su papel en las tres parte de la teleserie Soltera Otra Vez habló del mal panorama laboral para los actores y la industria audivisual chilena, situación que se agravó desde la llegada del coronavirus.
Bosh se contactó con El Aperitivo, espacio que se transmite en vivo por el instgagram de Velvet y estas fueron parte de sus palabras sobre el asunto:
«Y ahora ni que decir, ahora que están todos los rubros golpeados. El mundo actoral está en una crisis muy profunda. Y no solo actoral, el medio escénico en general”
Jordi Castell, anfitrión del espacio: “Hay actores cercanos a mí que los pilló (las medidas restrictivas ante el coronavirus) filmando una película y tuvieron que parar. Otros estaban grabando una serie en el norte y tuvieron que volverse a Santiago.
«El actor es la cara visible, pero tú y yo sabemos que detrás de un actor hay un equipo de por lo menos 50 personas que también tienen que parar e irse a su casa”
Lorena Bosch: “Exacto. Y eso es súper doloroso, porque nosotros, como bien dices tú, somos la cara visible y muchas veces somos los que tenemos mejores condiciones. Entonces, se nos castiga harto cuando decimos y denunciamos que hay una crisis importante.
“Pero no siempre esa crisis, esa denuncia, tiene que ver con uno directamente, sino con todo el equipo con el cual uno trabaja que en estos momentos está pasándolo mal. Esto en los medios audiovisuales, porque en el mundo del teatro todo el mundo lo está pasando mal.
“Yo creo que los actores, como bien decíamos recién, los equipos completos que producen series, teleseries y productos de ficción se han visto súper dañados.
«El área en el canal (Canal 13) la cerraron hace un buen rato, hace un par de años, y fue súper doloroso ver de pronto ver un piso completo, donde de pronto uno subía, donde había gente con la que llevaba años trabajando, y estaban todas esas oficinas vacías.
“Y ahora, de forma esporádica, entran las productoras y se vuelven a llenar esos espacios y está la sensación de que hay vida otra vez. Pero se provoca una emoción que es un poco desoladora, desesperanzadora también”.
