El chascarro de la periodista Cecilia Gutiérrez en los Copihue de Oro con el vestido que le prestó Carolina de Moras
«Faltaba poco tiempo y con cuarentena, todo cerrado, y con los tiempos donde no se puede dar el lujo de comprar un vestido, pensé que lo más a mano era pedirle ayuda a Carola de Moras. Yo sé que tiene hartos vestidos. Era un desafío que me entrara uno, que me quedara bueno (ríe). Y le escribí y me dijo altiro que sí…», cuenta Cecilia Gutiérrez.
La periodista y panelista de Me Late fue una de la conductoras de la entrega del Copihue de Oro 2019, que luego de postergaciones debido al estallido social y la pandemia de covid-19, finalmente se realizó el viernes pasado –esta es la lista de ganadores-.
La premiación se realizó en un programa, cumpliendo las normativas sanitarias, en los estudios del diario La Cuarta, organizadores del trofeo de votación popular y se emitió en un especial de Me Late.
Los rostros de la transmisión fueron representantes de cada canal y Gutiérrez fue por TV+.
La profesional sufrió un chascarro con el vestido estilo Hervé Léger que le prestó Carolina de Moras, con quien tiene cercanía. Aquí cuenta lo sucedido:
“Me avisaron con poca anticipación porque primero iba a ser la Yaz (Vásquez, quien representara a TV+ en la premiación), pero tiene una enfermedad de base y es muy complicado que salga de su casa. Así que tuvo que desistir y me llamaron.
«Faltaba poco tiempo y con cuarentena, todo cerrado, y con los tiempos donde no se puede dar el lujo de comprar un vestido, pensé que lo más a mano era pedirle ayuda a Carola (de Moras). Yo sé que tiene hartos vestidos. Era un desafío que me entrara uno, que me quedara bueno (ríe). Y le escribí y me dijo altiro que sí.
“Me prestó varios y elegí este, que era más ajustado y claro, ahí estuvo el problema, porque era súper ajustado. Me lo probé dos veces, para ver el tema de los zapatos y después no me lo volví a probar. Y es un vestido súper ajustado, con cierre atrás.
«El día del Copihue llegué, me maquillé, quedé lista, me voy a poner el vestido, le abro el cierre, me lo pongo y, como el cierre era completo atrás, lo voy a subir de la parte suelta y no subió. Como que el cierre se trabó. Y esos cierres son tan delicados que, si uno les hace fuerza, se abren o rompen.
“Entre los nervios de que era tarde, no subía el cierre, entré en una seudo desesperación. Así que le escribí al productor del Copihue y le dije que tenía un problema con el vestido. Y ellos atinaron súper rápido, llegaron con una huincha, cinta, y con la ayuda de mi pololo y una diseñadora de La Cuarta terminé con el vestido encintado atrás.
“Fue complicado porque con el calor del estudio se iba despegando la cinta. Todo el rato estuve preocupada entre que tenía que animar, conducir, ceñirme a la pauta y preocupada porque el vestido iba como medio cediendo. Así que fue súper incómodo. Y nada. Lección aprendida. Para la próxima hay que andar con dos vestidos.
“Llamé a la Carola, le conté lo que me había pasado y lo primero que me dijo fue ‘siempre tienes que andar con dos vestidos porque le puede pasar algo al cierre, lo manchas con maquillaje, te tomas un café y se te da vuelta’. Y no pensé en ninguna de esas variantes…»
