Ennio Carota sobre ser padre a los 50: «Con Marisa, cuando me junté con ella, sabía que si ella quería ser madre, yo no podía quitarle esta oportunidad…»
“¿Cómo cambió tu vida enfrentar nuevamente la paternidad a los 50?”, le preguntó Sergio Lagos a Ennio Carota en Sigamos de Largo.
El cocinero italiano radicado en Chile se contactó con el late de Canal 13.
El personaje televisivo de 64 años que se hizo conocido en MasterChef tiene un hijo de 33 en Italia, producto de su primera relación formal.
Mucho después formó un hogar con Marisa Sotelo, con quien tuvo a sus dos hijos menores, Rocco y Tiziano, de 12 y 10 años.
Esta fue la respuesta de Carota a la consulta de Lagos:
Ennio Carota: “Uno a veces hace cosas de forma inconsciente. Si tú empiezas a planificar y sacar cuentas y poner las cosas en un Excel, la fórmula no te va a dar. Pero creo que cuando uno siente, lo hace.
“Con Marisa, cuando me junté con ella, sabía que en algún momento, si ella quería ser madre, yo no podía quitarle esta oportunidad. Eran dos opciones: o iba a ser padre junto a ella o me iba a separar. Y al final me gustó la idea de volver a empezar esta historia y decidimos, mutuamente, tener a Rocco.
“Rocco llegó inmediatamente. Fue increíble. Fue una experiencia de verdad muy hermosa. Parece ayer, pero ya pasaron 13 años, 12…”
Lagos: “Aquí están tus hijos, que quieren saludarte”
Rocco, en un video: “Hola, soy Rocco”
Tiziano: “Hola, soy Tizi”
Rocco: “Acá estamos con Rita María (su perrita) para mandarle un gran saludo a mi papá. Estamos orgullosos de él, de su trabajo en general. Es una gran inspiración para mí. Es un papá excelente que se preocupa por nosotros. Es un gran orgullo”
Tiziano: “Papá, de acá te mandamos un gran saludo. Te mandamos un gran éxito en todo lo que emprendas y en la vida. Te mandamos un fuerte abrazo. Chao”
Carota: “Muchas gracias. La verdad que sí”
Lagos: “Te emociona encontrarte con ellos tan grandes, tan hombres ya, a pesar de su corta edad”
Carota: “La verdad es que sí. Rocco es una persona a la que no se le escapa nada. Súper atento, súper protector. Le gusta lo que hago, le gusta comer, sabe mucho de cocina, es un tremendo crítico. Me critica todos los platos que hago. Me encanta.
«Yo no sé qué va a ser de su vida, pero no importa. Yo pienso que la gastronomía es cultura y el paladar se educa. Desde niño se les enseña para que ellos, cuando sean grandes, puedan disfrutar de este mundo”.