Carlo von Mühlenbrock: «Los cocineros, que lo hemos pasado súper mal, porque todos los restaurantes cerraron… Va a ser muy difícil que se levanten»
“Por suerte, y ahí tengo un ser o un ángel, una fuerza, alguien que me cuida, había tenido la oportunidad de cerrar los restaurantes hace tres años», cuenta Carlo von Mühlenbrock, refiriéndose a la dura crisis por la que pasan los establecimientos de comida con la pandemia de coronavirus.
El chef de 48 años se contactó con el espacio que Angélica Castro emite en vivo a través de instagram.
Von Mühlenbrock se refirió a su trabajo en el programa Carlo Cocina Vida Sustentable en 13C, la señal cable de Canal 13, y como ha vivido laboralmente estos meses de cuarentena:
Angélica Castro: “Cuando parte la pandemia, ¿te pilló en algún proyecto específico? ¿Tuviste que detenerte en algún proyecto o hacer un cambio?”
Carlo von Mühlenbrock: “Yo venía con el lanzamiento full del Carlo Cocina, el programa que he hecho en Canal 13. Hace dos años le hicimos una bajada distinta, se llama Carlo Cocina Vida Sustentable. En el 2018 dijimos ‘démosle esta bajada’. Fuimos caminando paulatinamente, la cosa empezó a funcionar. A la gente le gustó el programa y se fue posicionando, convirtiéndose en uno de los programas más vistos del canal. Más allá del ego, te da la tranquilidad para decir ‘este tema interesa, demos el segundo paso’.
“Y en ese segundo paso dijimos ‘vamos a trabajar con un equipo increíble de profesionales que tengan que ver con la sustentabilidad’. Hablamos con Jaime Saa, experto en arquitectura saludable; con Cata Barros, ingeniera agrónoma experta en suculentas; Marisol Salas, del Pueblito de Liray, curadora de semillas; con Valeria, paisajista que estaba empezando a hacer huertos urbanos.
“Con este equipo crecimos y en la parcela donde vivo hagamos un proyecto grande de cambiar el paisaje completo de este lugar a un paisajismo comestible. De una casa que tiene un jardín bonito, como una parcela, mostremos cómo. Hicimos además un gallinero, que ya tenía hace un tiempo, pero lo hicimos profesional.
“Convocamos a todo eso. Íbamos a partir con todo y pasa lo que pasa, pero seguimos trabajando igual, nos dimos cuenta que era una oportunidad lo que viví. Cuando parte la pandemia, en marzo, me encuentro con una huerta súper robusta, llena de productos. Tengo padres que son ambos adultos mayores, súper autovalentes, que están súper bien. Mi hermano es doctor y fue súper estricto y dijo ‘no sacan ni la nariz de la puerta de la casa’.
“Nos pusimos de acuerdo, dije ‘ok, me hago cargo de la alimentación’. ¿Y sabes lo gratificante de poder compartir con tu familia y con tus vecinos los productos que tiene tu huerta? Es que no estás gastando agua para regar un jardín, sino que alimentos. Me hizo un click tremendo. Y venimos con todo. Ya partimos hace un mes la nueva temporada y empiezan refacciones, invernaderos, más huertas. También vamos a hablar de agricultura biodinámica, los ciclos de la luna y su influencia en el cultivo.
“Estoy feliz y lo he tratado de ver como una oportunidad de acompañar a la gente. Los cocineros, que lo hemos pasado súper mal, porque todos los restaurantes cerraron y están pasando por un periodo muy crítico, más allá de que esto pase, va a ser muy difícil que muchos restaurantes se levanten; acompañando ahí a la gente, a los restaurantes y ocupar estas plataformas para estar comunicados.
“Por suerte, y ahí tengo un ser o un ángel, una fuerza, alguien que me cuida, había tenido la oportunidad de cerrar los restaurantes hace tres años. Cerré con mucha pena en Parque Arauco, el Carlo Cocina, de emprendimiento. Me equivoqué, no era el lugar para tener el mercado. Después deciden crecer hacia ese lado y me piden el local, no fue una buena experiencia estar ahí, debo decirlo.
“Y después está el Osadía, que se vendió porque se está haciendo un edificio ahí. Fueron justos los minutos y tuve la capacidad de reinvención antes. Tuve suerte frente a lo que está pasando”.