La historia personal detrás de la pelada de Augusto Schuster
“Mi papá era pelado y era pelado orgulloso, tenía un cartel en su pieza que decía ‘Dios creó pocas cabezas perfectas y las demás las cubrió con pelo’. Entonces era chistoso, nunca lo vi como algo malo ser pelado», cuenta Augusto Schuster.
El actor y cantante de 28 años se contactó con el espacio que Martín Cárcamo transmite en vivo por instagram.
Schuster habló de temas como su cuarentena, la relación con su madre, o los maltratos que recibió de otros adolescentes cuando empezó su carrera televisiva, a los 14 años en el espacio Amango, en Canal 13.
“Simplemente por salir en la tele a mí me pegaron muchas veces…”, dijo, y relató una paliza que le propinaron otros escolares en un local McDonald’s.
También se refirió al cambio de look que tuvo en 2018. Sobre esto agregó:
“Cuando empecé a trabajar se me empezó a caer el pelo y yo decía ‘voy a ser pelado. Que lata que en mi trabajo ser pelado te límite un poco a ciertas cosas. Pero bueno, es así nomás, será cuando tenga que ser y me raparé, no tengo problema. O quizás no me rapo y sale una solución perfecta. O quizás no’. Tampoco me urgía mucho con el tema.
“El año en que yo me rapé había sido un año muy difícil en términos emocionales, no lo había pasado muy bien por un tema personal. Tuve un crecimiento personal y raparme fue una catarsis.
“Viajé a Rapa Nui, allá tengo una familia amiga que siempre me recibe, me gusta mucho la isla, tengo una conexión muy bonita con la isla. Cuando llegué allá dije ‘¿sabes qué? Me voy a rapar’. Me quedaban dos meses para empezar a grabar la próxima teleserie, me había llegado el comentario de que el personaje quizás era malo, entonces dije ‘me rapo y llego al canal a proponer este look’.
“Y me rapé nomás, me rapé en Rapa Nui, fue súper bonito. Hay una peluquería en Rapa Nui, fui y le dije ‘rápame al seco, pero con navaja por favor’. Me dijo ‘¿estás seguro?’. Estaba la hija y quedó para la cagá.
“Me rapé, me fui para la casa y me fui con la pelada al viento. Me fui a tirar al agua, al mar. Brillante, estaba brillante. En Santiago me decían ‘¿qué brilla en el mar? Creo que te veo?’ (ríe). Así fue.
“Cuando llegué a Santiago, llegué al canal a la propuesta del personaje y dije ‘me rapé, igual quedan dos meses, en dos meses mi pelo va a crecer normal, podemos armar algún look. Pero me podría quedar así’. Y a la Quena (Rencoret, jefa del área dramática de Mega) le encantó la idea… Quizás no le encantó, pero aceptó la propuesta”.
