Glamorama
Camila Stuardo, su esposo y sus amigos coreanos del "carrete coreano" en una foto tomada del instagram @fans_carrete_coreano

Camila Stuardo y sus «carretes coreanos» por Instagram: «Personas pegadas viendo cómo nos emborrachábamos, cómo web… y peleábamos. Ahora en total se meten 16.800 personas»

Autor: Fran Varela / 29 septiembre, 2020

“Los coreanos son súper buenos para el carrete, mis peores borracheras son con ellos…», contó Camila Stuardo, hace tres semanas, en el programa que Martín Cárcamo emite en vivo por Instagram.

La figura televisiva de 31 años se refirió a la trombofilia que padece, a su gusto por las comunicaciones y la televisión y a sus diez años de relación con su marido, el ingeniero Javier Urzúa, entre otros temas.

También contó cómo comenzaron a hacer los carretes coreanos. Stuardo se conecta todos los jueves en Instagram Live junto a su esposo y un matrimonio amigo de Corea, Claudio Kwon y Sergio Raziel Yi Han, donde juegan y conversan distintos temas. Este fue su relato:

“Nosotros somos amigos de la Clau y Raziel, nos conocimos por el colegio, apoderados del colegio. Yo la misma edad que ella. Ellos, hombres, la misma edad. Entonces enganchamos rápido y nos hicimos súper amigos. Las dos tenemos dos niñitas, entonces se entienden súper bien.

“Los coreanos son súper buenos para el carrete, mis peores borracheras son con ellos. La cosa es que todo el mundo me escribía ‘que buena onda se ven los coreanos, que ganas de carretear con ellos’. Y mis amigos coreanos súper reservados, Instagram cerrado, igual que Javier, que en su minuto ‘no, redes sociales no’.

“Un poco lo hablábamos con Javier de atravesar la barrera del miedo, hay cosas tan lindas atravesando ese miedo. Entonces la Clau en esta pandemia me dice ‘amiga, tengo ganas de abrir mi Instagram y de que la gente nos conozca’. Le dije ‘¿en serio? Hagamos un live los cuatro juntos y seamos nosotros mismos’.

“Y ya poh, nos juntamos, hagamos un live, subamos una foto. La cosa es que lo subimos y Javier me dice ‘gorda, onda a los grandes de la televisión los ven 300 o 500 personas, con que nos vean 100 personas es un éxito’. Y nos conectamos a poto pelado, sin pauta, sin nada, ‘seamos nosotros’.

«Nos metimos y empezó 700, 800, 900. Nosotros ‘wow’. Se conecta la Clau, 1.500, 1,800. Primer día 2.500 personas pegadas viendo cómo nos emborrachábamos, cómo webiábamos y cómo peleábamos. O sea, no lo podíamos creer.

“Terminamos el live, nos desconectamos y decíamos ‘¿qué mierda pasó?, ¿por qué tanta gente nos vio?’. Si al final yo era la única que tenía muchos seguidores, pero no me lo esperaba. Entonces ‘ya, vamos otro jueves’, lo mismo. Otro jueves… Ahora marcamos 4.500 ó 4.900 personas simultáneo. En total se meten 16.800 personas y nosotros estamos que no lo podemos creer.

“Ponemos un tema de conversación, lo hablamos, después jugamos ‘Lugares que Embriagan’, en honor a Pancho Saavedra, y nos ponemos a jugar. Yo creo que a la gente lo que más le gusta es que somos absolutamente nosotros mismos.

“Al final la gente lo está pasando mal en esta pandemia. Ven en las noticias puras malas noticias. Entonces llega el jueves y nosotros les decimos ‘olvidémonos una hora y media de todo’ y simplemente nos reímos de nosotros mismos’.

“La gente ha sido impresionante, mis amigos están súper sorprendidos. Yo estoy muy contenta de poder mostrar una nueva cultura, a nuestro país cada vez llegan más culturas. Raziel con la Clau son chistosos, les da lo mismo. Pero es un programa donde la pasamos la raja y que si lo tiramos a la televisión nos cortan de una”.