“Doctor, quiero una lipo, que me saque todo lo que me está sobrando…»: Carolina Arregui relata su primer encuentro con su marido cirujano plástico
Durante las grabaciones de la teleseries de Canal 13 Machos, a comienzos de 2003, Carolina Arregui conoció al cirujano plástico Roy Sothers. A los días él le hizo una liposucción y poco después comenzaron a pololear.
Se casaron en 2016 y esta semana la actriz recordó, en el programa De Tú a Tú, como conoció al médico:
Martín Cárcamo, conductor del espacio de Canal 13: “¿Cuántas veces te has enamorado en tu vida?”
Carolina Arregui: “Dos. Corta. De joven y de mayor”
Cárcamo: “De Óscar y de Roy, dos amores distintos, pero esas dos veces te has enamorado”
Arregui: “Sí”
Cárcamo: “Háblame de Roy, ¿cómo conociste al hombre de tu vida?”
Arregui: “Lo conocí cuando estaba haciendo Machos en Canal 13, esa teleserie se grabó prácticamente un 80% en Viña o Reñaca. Como estaba en Viña había un cirujano plástico que estaba en Viña, me lo había presentado en un programa Iván Núñez. Me acuerdo que fue en Primer Plano, ahí me lo presentó, me dijo ‘Carola, si te tienes que hacer algo, esta es la persona’.
“Y me acordé de él, tenía la dirección y todo. Empecé a ver mi plan de grabación y no tenía grabación ni lunes ni martes y esto fue un viernes, dije ‘tengo viernes, sábado, domingo, lunes, martes, listo, me alcanzo a recuparar’.
“Entro, no había pedido hora ni nada, me recibe, abre la puerta y fue como un momento de cámara lenta”
Cárcamo: “Todo se detiene y solo estás tú y esa persona”
Arregui: “Claro, y era como una cámara que daba vueltas, te lo juro, yo me imagino eso. Yo lo miraba como si lo hubiera conocida de alguna parte, no de ese día que me lo presentaron, sino como que algo pasó”
Cárcamo: “Una cosa como energética”
Arregui: “Sí. Entonces me dice ‘¿quieres pasar?’. ‘Doctor, necesito que me reduzca a la más mínima expresión, ¿podrá usted hacer eso por mí? Pero tengo solamente tres días para recuperarme. Quiero que me reduzca, una lipo, que me saque todo lo que me está sobrando porque estoy comiendo mucha empanada’. Listo”
Cárcamo: “Ah, pero tú fuiste así, le pediste que te hiciera una lipo y más encima en tres días querías que te tuviera lista para seguir grabando”
Arregui: “Yo no podía parar las grabaciones poh. No me preguntes qué poder de convicción, pero lo logré. Creo que fue la peor decisión que pude haber tomado en mi vida y la mejor. La mejor porque lo conocí y la peor fue porque lo pasé como el hoyo”
Cárcamo: “¿Es doloroso?”
Arregui: “Terrible. Es atroz, la guata, es que me… Ahora ya me estoy manteniendo con dieta, con ejercicio, con abdominales, hay que cuidarse”
Cárcamo: “O sea, llegaste donde Roy, lo conociste y a la hora estabas desnuda frente a él”
Arregui: “Ay, pero por qué tenemos que llegar a ese punto, Martín”
Cárcamo: «Por pega digo yo, tenía que revisarte”
Arregui ríe: “Me da rabia. Él me dice ‘a mí también me da rabia porque tú te la pasas puro dando besos’. ‘¿Y tú? Te la pasas puro agarrando tetas, así que no me webees’.
“Como soy decidida para mis cosas, ‘ahora a apechugar nomás Carolina Arregui, démosle que se puede’. Y fajá entera, con mi delantal haciendo empanadas, el día miércoles estaba grabando de vuelta”
Cárcamo: “¿Y nadie se enteró?”
Arregui: “Sí poh, casi me mataron, la (productora ejecutiva) Vero Saquel me dijo ‘¡¿pero tú estás loca, cómo se te ocurre hacer una cosa así?!’. ‘Bueno, pero aquí estoy’”
Cárcamo: “Te operó Roy, ¿y en qué minuto enganchaste con él”
Arregui: “En el post operatorio poh. Yo con suerte me podía mover, entonces iba a grabar, me movía lo justo y lo necesario y me iba al hotel.
«Un día le pedí que me fuera a ver porque en realidad me dolía mucho. Bueno, me fue a hacer la visita técnica al hotel y yo dije ‘pucha, lo menos que puedo hacer es convidarle un pisco sour, un picoteo’.
«Y de repente como que encontramos entretenido ponerse a conversar un rato de la vida, no de las operaciones. Y lo encontré súper interesante al hombre este, a mí me encanta la gente interesante, inteligente, con humor, y como que me gustaron esas cosas de él.
“Lo voy a dejar al estacionamiento, se despide, todo bien. De repente se devuelve y me dice ‘¿te dije que estás muy bonita?’. Me podía morir. ‘No’. ‘Estás muy bonita’. Y ahí, pum, cuneteado. Me dejó plop.
“Como que ahí empezaron a pasar cosas, pero de a poco, muy medido, yo con hijos, él también, él ya se había separado. Pero estaba todo muy reciente, no daba como para empezar una relación.
“Pasó un tiempo, después me hizo varias revisiones técnicas y en una de esas revisiones me dijo ‘a ver, tengo que acomodar un par de cosas aquí’. Yo dije ‘oye, convídate un pisco sour más que sea poh’.
“Y ahí no sé en qué minuto, pero fue algo muy bonito. Le mostré este mundo de la televisión, me acompañaba de repente a grabar, le presentá a mis compañeros de trabajo”.