Glamorama
Alvaro Ballero y Ludmila Ksenofontova en una foto que él compartió en su Instagram @balleroa en diciembre de 2020.

«Esa fuerza me hizo salir adelante y lograr mis sueños, del ‘chico reality’ a gerente de marketing del mismo canal…»: el reconocimiento de Alvaro Ballero a su esposa Ludmila

Autor: C. F. R. / 19 junio, 2021

«Nuestro secreto, tenernos a nosotros, la familia, nada más», concluye Alvaro Ballero en un mensaje que posteó en su cuenta Instagram este fin de semana que se celebra el Día del Padre.

En su posteo el ejecutivo de Canal 13 que se hizo conocido a los 19 años en el primer reality show chileno, Protagonistas del Fama, reconoce a su esposa, Ludmila Ksenofontova.

Se conocieron hace doce años cuando fue su compañera de baile en el programa Estrellas en el Hielo, que emitió Chilevisión. Luego se casaron y forman una familia con cuatro hijos.

Este es el mensaje de Ballero:

«Nada, pero absolutamente nada podrá mermar, borrar, siquiera amenazar lo que somos, porque la historia es una y nosotr@s decidimos hacerla desde cero, literalmente, sin dinero, sin casa, sin títulos, Ludmila y yo… Así de simple y ‘riesgoso’ para el ‘sistema’ que tantos veneran y el resto detesta.

«Me conoció con abdominales, era lo único ‘de valor’ que tenía aquel otoño del 2008… Dormía sobre un colchón en el living de la casa de unos amigos, sin durmientes, no pagaba arriendo, ni auto tenía… Y la Rusa creyó en mí, mucho más de lo que yo mismo creí.

«Esa fuerza me hizo salir adelante y lograr todos mis sueños, del ‘chico reality’ a gerente de marketing del mismo canal donde estuve encerrado 91 días, y como líder de la marca -y creativo de la misma- ganamos el premio más importante a nivel global para el marketing del mundo del entretenimiento… Nada nos ha botado, ni siquiera los intentos más oscuros, como los que vivimos este año…

«Hoy, junto a mi equipo en Trecelab hemos cerrado los negocios más grandes de nuestra historia y en mi vida seguimos felices, como siempre…

«Nuestro secreto, tenernos a nosotros, la familia, nada más».