«Quedé embarazada a los 15 años… Nunca hubo esa comunicación en la casa, nunca hubo un ‘te tienes que cuidar’»: el testimonio de Michelle Carvalho sobre aborto
“Me pasó una situación muy fuerte a los 15 años de la cual me embaracé. Quedé embarazada a los 15. Era una niña y estaba generando un niño adentro mío. Y nunca hubo esa comunicación en la casa, nunca hubo un ‘te tienes que cuidar’. No existía esa confianza de padres a hijos de conversar y cuidar. Más encima en ese mundo que yo vivía tan adulto, tan liberal, tan expuesta, entonces yo ni siquiera sabía lo que era un condón».
Así comenzó el testimonio de Michelle Carvalho en La Divina Comida sobre aborto que vivió.
La modelo brasileña que reside en Chile tiene 27 años y se hizo conocida al protagonizar una escena ya clásica en los reality shows chilenos, en Mundos Opuestos en 2012, junto a su entonces pololo el argentino Joche Bibbó. Luego participó en otros shows de telerealidad.
Ahora, en el programa de Chilevisión relató que partió a los trece años en el modelaje internacional, cuando fue descubierta en un mall y fichó por la importante agencia Elite.
En tanto, estas fueron sus palabras sobre el aborto:
“El hecho sucedió en una fiesta. Sabía lo que estaba haciendo pero no tenía conciencia de todo y era mi segundo viaje internacional, a París, que era uno de los países que apoyaba a las mujeres a tomar la elección que querías, si querías o no querías.
“Llegó un momento donde dije ‘o asumo esto ahora o me hago cargo, porque en las fotos se va a empezar a notar, y tengo que arreglar eso ahora y ver lo que quiero de mi vida’.
«Pedí ayuda a la agencia, dije ‘me pasó esto y necesito ayuda’. Me dieron la opción ‘¿quieres volver a tu país, verlo con tu familia? ¿O lo quieres solucionar aquí?’. Y yo ‘lo quiero solucionar aquí’. Y empieza todo ese proceso donde un país te acoge, te dan derecho de elegir lo que tú quieres, te pasan por un sicólogo, dónde lo quieres hacer, cómo lo quieres hacer, muchas alternativas
“Para poder hacerlo tenía que tener un permiso de mi madre, porque como era menor tenían que dar el permiso. Fue cuando la tuve que llamar y comunicarle que era era abuela. Y mi madre casi se muere del otro lado. ‘Yo encuentro que tú eres una niña. Una niña no está en condiciones de cuidar de otro niño’. Y dijo ‘haz lo que tengas que hacer y lo que sientas y me lo avisas’.
«Y cuando estaba todo ok para la fecha, me llama y me dice ‘no. Ven a Brasil, yo te apoyo, te cuido, nos ocultamos en una hacienda y no tienes que parar tu vida por eso, me lo regalas, haz lo que quieras, después sigues tu vida’.
“Me dio millones de alternativas y yo no podía imaginar mi vida, ver un hijo creciendo y llamándome de hermana, y que un día yo quisiera entrometerme en su educación y me dijera ‘¿qué hablas?, si tú no eres mi madre’. Me pasó todo ese rollo en la cabeza y dije ‘no. No puedo hacer eso’. Y fui y lo hice.
«Ese hecho me marcó mucho y es algo que, si pudiera cambiarlo, lo habría cambiando de poder tener más comunicación, más información. Y veo que ese hecho sucede mucho en Chile por ser un país muy conservador y los padres no tener confianza con los hijos de poder hablar todo eso, para poder prevenir esas cosas que pasan. Si hubiese un poco más de comunicación…
«Parte tanto de la educación a las mujeres, cómo prevenir, como tanto por educar a los hijos también de cómo prevenir. Siempre es 50 y 50. Las mujeres deben saber lo que están haciendo y el hombre también tiene que saber como cuidarse. Y no hay educación de ninguna parte, ni del lado de la mujer ni del hombre».