«Es desagradable el besuqueo. Uno también tiene estómago, huele. Pero Zabaleta no tenía mal… Solamente pucho y café», cuenta Pancha Merino sobre la grabación de teleseries
“Tengo una historia de tus ex compañeros actores. ¿Es verdad que tú repartías pastillitas de menta a los colegas?”, le comentó Julio César Rodríguez a Pancha Merino en Pero Con Respeto.
La actriz de 48 años que se hizo conocida en las teleseries Adrenalina, Playa Salvaje y Cerro Alegre (en esta, en 1999, fue pareja del personaje interpretado por Jorge Zabaleta) estuvo en el late que conduce Rodríguez en Chilevisión y contestó de la siguiente manera a la consulta del periodista:
“Sí. Sabes que es desagradable el besuqueo. ‘Pero si eres actriz’. Sí poh, pero uno también tiene estómago, huele y yo soy jodida con ese tema. Y tenía uno que no me gustaba mucho su aroma y yo pateando la perra. Bueno, ahora estoy más vieja, bajaría la frecuencia, lo aceptaría más. Pero en esa época como que me daba vueltas en la cabeza. Me jodía”
Pancha Julio César Rodríguez: “Y comprabas tus pastillitas”
Merino: “Claro. Le pedía consejos a la Ale Herrera. ‘Dale una pastillita’. La Ale tiene otro modo al mío. ‘Oye, propónelo, buena onda…’ Y yo le tuve que haber dicho ‘oye, te puedes tomar la pastilla, estoy chata de tu…’ Y me mandó a la cresta”
Rodríguez: “¿Se enojó contigo?”
Merino: “Sí. ‘No tengo por qué…’”
Rodríguez: “¿Quién era ese?”
Merino: “No, no puedo decir. Pero cualquier hombre que no sea tu pololo te da lata darle besos”
Rodríguez: “Pero este beso ya está prescrito, pasó hace como 25 años”
Merino: “Bueno, pero Zabaleta no tenía mal… Solamente pucho y café, que también es desagradable el olor a pucho y café, sobre todo el de café con leche. No. Si no me acuerdo si era café con leche, pero me acuerdo que era pucho y café”
Rodríguez: “¿Te besuqueaste harto con Zabaleta?”
Merino: “No. Yo por ahí nunca. Jamás”
Rodríguez: “No, pero en la teleseries estoy hablando”
Merino: “Ah, ya”
Rodríguez: “Pero si de eso estamos hablando Pancha. ¿Fueron compañeros de colegio?”
Marino: “Sí, pero él era mucho más grande que yo”.
