«El me llama al celular. Y cuando empieza ‘hi Angélica, it’s David (Copperfield…)’ Llego y le digo ‘oh, yes. I’m Claudia Schiffer'», recuerda Angélica Castro
“Estaba acá en Canal 13 y me llaman de arriba y me dicen ‘Angélica, necesito que vayas a hacer una entrevista a Venezuela’. ‘Qué entretenido. Obvio, yo voy’. ‘Es que como tú eres la única del canal que habla inglés’. Yo no hablaba inglés, chamullaba con tutti y le ponía una onda que todos juraban que hablaba inglés, pero no hablaba nada».
Este fue parte del relato de Angélica Castro sobre su primer encuentro con David Copperfield, a fines de los años ’90.
La animadora de 49 años y el famoso ilusionista estadounidense de 65 posteriormente tuvieron un romance. Una de las pocas fotos de la pareja se publicó en 1999, cuando llegaron a una fiesta organizada por el rapero Puff Daddy.
Esta semana Castro contó cómo conoció a Copperfield durante un capítulo de Los 5 Mandamientos, programa que conduce Martín Cárcamo en Canal 13, donde estuvo incitada junto a Sergio Lagos.
Así continuaron las palabras de la esposa de Cristián de la Fuente:
“Entonces les digo ‘sí, sí, yo hablo inglés’. ‘Bueno, tienes un desafío, vas a entrevistar a David Copperfield’. Y yo me quería morir. David Copperfield siempre ha sido el ilusionista número uno del mundo, pero además andaba con la Claudia Schiffer. Era una cosa de otro universo.
“Me mandan a hacer esta entrevista, yo matea a morir, me puse a estudiar la entrevista, contraté a un profesor y estudié todas las posibles preguntas y respuestas. Entonces él me hacía la pregunta, la memorizaba y todas las posibilidades él me las daba en inglés. Cáchate la pega. Y yo memorizando, así estuve de lunes a viernes”
Sergio Lagos: “¿Tú encontrabas que era un tipo atractivo previamente?”
Castro: “No. No lo había mirado como hombre. Yo estaba soltera sí. Pero fui absolutamente focalizada e histérica, de verdad que me tiritaba todo, imagínate me contesta algo distinto”
Martín Cárcamo: “Pero te condoreaste poh”
Castro: “Claro, cometí un error. Lucho Jara no es el único que se equivoca en el inglés. La entrevista iba tan bien, hasta la última pregunta fue impecable, él contestando increíble, yo iba entendiendo sus emociones a través de lo corporal.
“Entonces al final me fue tan bien que dije ‘voy a improvisar’. Termina la entrevista y yo dije ‘¿él tendrá mascotas?’, porque a mí me encantan las mascotas. Entonces llego y le digo ‘David do you have a mascot?’. ¡’Mascot’!
“Y a él le pareció tan gracioso, que se rio y ‘¡mascot, mascot!’. Después a mí me habían dicho que él viajaba con los papás siempre, entonces yo ‘¿cómo le pregunto si viaja con los papás? Papá es father. Listo. Plural es fathers’. Entonces le digo ‘do you travel with your fathers?’. Y ahí ya lo encontró genial, la risa, pucha la galla simpática”
Cárcamo: “¿Y ahí enganchaste con él?”
Castro: “Ahí me invitó a comer. Se me acerca el mánager, yo estaba con el productor y le dice algo en inglés. Yo mirando, no entendía nada, pero con cara de ‘estoy entendiendo todo’. Y le digo al productor ‘¿qué está diciendo?’. ‘Es que te quiere invitar a comer’, ‘No. Dile que no’.
“¿Cómo iba a ir a comer si yo no hablaba inglés? Anda a hablar con alguien que te habla en un idioma que no hablas. Me fui. El problema es que eso es lo peor que le puedes hacer a un hombre poh. Entonces quedó más picado. Bueno y yo volví a Chile.
“¿Tú sabes cómo nos encontramos nuevamente? Porque eso es súper clave. La peor vergüenza de mi vida. Me pasó que él me llama y yo trabajaba con el equipo de Cristián San Miguel, puros hombres.
“Entonces me llaman al celular, yo estaba en el gimnasio en una trotadora y de repente ‘hello’. ‘¿Quién es?’. ‘David’. Y yo dije ‘estos que son pesados. ‘Ya, ¿qué pasó?’. ‘No, no… Es David’. ‘Ya, San Miguel paren’. Me aburrí y le corté.
“Y me vuelve a llamar y cuando empieza ‘hi Angélica, it’s David’, yo quería matar al equipo. Y llego y le digo ‘oh, yes, you know what David? I’m Claudia Schiffer’”
Lagos: “¡No te puedo creer!”
Castro: “Y ahí se empieza a reír y yo digo ‘¡es la risa de Copperfield!’. Viste que por la risa uno reconoce a la gente”
Cárcamo: “Este gallo debe haber dicho ‘que simpática esta mujer, el sentido de humor que tiene’”
Castro: “Y ahí le corté de nuevo. Casi me da un ataque cuando caché que era él. Ahí sí que me quería morir de la vergüenza”.
