«Había gente famosa, la Amaya Forch, Alejandra Valle, la mamá de Maite Orsini…», recuerda Denisse Malebrán sobre el casting que la convirtió en la cantante de Saiko
“Nunca me pasé el rollo de que yo pudiera ser la persona que estuviera ahí. ‘Tienes que ir’, me decían. ‘¿A qué voy a ir yo? Yo no tengo ninguna posibilidad’», recuerda Denisse Malebrán sobre el casting para elegir a la cantante del grupo Saiko, a fines de los ’90.
La cantante ganó las audiciones y se transformó en la voz del grupo que llegó a tener un importante éxito.
Malebrán estuvo en un capítulo de Los 5 Mandamientos, programa que conduce Martín Cárcamo en Canal 13, y este fue su relato sobre su incorporación al conjunto del hit Cuando Miro En Tus Ojos:
“El Coti Aboitiz, que era el tecladista de La Ley, con Luciano Rojas, que era el bajista, fueron a un programa que hacía el Sergio Lagos en el Canal 2. Van y dicen ‘nosotros estamos buscando una vocalista para este nuevo proyecto’. Estamos hablando de otra época, dejaron un teléfono fijo.
“Yo estaba durmiendo, súper ñoña. Igual yo ya era mamá, tenía una vida bastante sacrificada, trabajaba en una disquería, estudiaba, tenía una responsabilidad con un hijo. Estaba acostada, me llaman y me dicen ‘¿cachaste que los ex Ley están buscando a una vocalista?’. Y yo ‘¿qué me importa a mí?’.
“Nunca me pasé el rollo de que pudiera ser la persona que estuviera ahí. ‘Tienes que ir’, me decían. ‘¿A qué voy a ir yo? Yo no tengo ninguna posibilidad’. Yo súper acomplejada en ese momento de que obvio que estos gallos habían dicho esto para la tele. Siempre pensé mal, dije ‘esta cuestión está cocinada’.
“Pero dije ‘¿en realidad qué pierdo? Capaz que sea bueno que vaya por lo menos para conocerlos. Para tener un contacto con gente importante dentro de la música que a mí me gustaba’. Llamé por teléfono, me contestó un gallo muy pesado, me dice ‘¿sí?’. ‘Estoy llamando por una audición’. ‘Ya, tienes hora el martes a las once y media’.
“No te daba una opción y yo trabajaba. Tuve que decirle a mi jefe ‘sabe que mañana tengo una audición, ¿usted me daría permiso?’. Y el gallo al principio no dijo nada, entonces yo estaba así, porque había quedado de ir pero no tenía permiso. Y dije ‘por último me voy nomás y me echan, pero tengo que ir’.
“La cosa es que esto era en la estación Mapocho. Llegué muerta de miedo. Era por hora, entonces no te topabas supuestamente con gente, pero llego y había ene de cabras esperando, todas muy onderas, bien vestidas. Había gente famosa, estaba la Amaya Forch, la Alejandra Valle, la mamá de la diputada Maite Orsini y también estaba la vocalista de una banda bien popular.
“Era toda gente que ya tenía un nombre. Yo era ene-ene totalmente, tocaba en el under-under y no me cachaba nadie. Pero llegué muy barsa, siempre lo cuento, porque es la personalidad cuando tienes 20 años. Así como ‘hola, ¿cómo estás? Yo también compongo, esta es mi música’. Y estos gallos me miraban como ‘¿qué le pasa a esta loca?’.
“Y creo que enganché en la buena onda principalmente con el Coti, fue muy empático con lo que le contaba, porque los otros no me pescaron nada. Llegué a mi casa y estaba pendiente de que sonara el teléfono. Era terrible. Tuve que ir a trabajar al día siguiente y no me llamaban.
“Un día llegué chata, una hora en micro, vivía súper lejos de donde trabajaba, llegué a la casa y mi hermana me dice ‘te llamaron’. ‘¿Quién?’. ‘No sé, ahí anoté la cuestión’. Y voy desesperada a buscar el papel y decía ‘preséntate el viernes a las 12 del día’. Pero mi hermana anotó cualquier cuestión, yo supe después que estaba pre seleccionada.
“No tenía a quién llamar, entonces tampoco podía llamar de vuelta para preguntar si se habían equivocado o si era yo. Y quedé pre seleccionada, no quedé seleccionada altiro, sufrí harto rato. Me tuvieron ahí. Me confirmaron el 24 de mayo, me acuerdo porque estaba de cumpleaños un amigo y en el cumpleaños celebramos, porque me habían dicho ‘ya, tú vas a ser la vocalista’”.