«Mi hermana, que murió de cáncer, cuando cayó en la etapa más crítica yo estaba (trabajando) en el Festival de Viña…», recuerda el periodista Sergio Rojas
«Mi hermana, que murió de cáncer, justo cuando cayó en la etapa más crítica yo estaba en el Festival de Viña y figuraba bailando axé, porque Viña en Canal 13 era una fiesta», recordó Sergio Rojas en Me Late Prime.
El periodista se refirió a su hermana Antonia, madre de dos hijas, quien falleció en febrero de 2015.
Así continuó el relato del profesional en el programa en el canal TV+:
“¿Entonces qué hacía yo? Terminaba el programa a las 13.30 o 14, hacía la pauta y todo. De hecho, en el canal nunca supieron, y me volvía a Santiago, me quedaba en la clínica hasta las tres o cuatro de la mañana y me volvía a Viña.
“Nunca nadie se enteró durante toda esa semana. Hasta que un día yo voy donde la (entonces productora de Canal 13) Jacqueline Cepeda y le digo ‘mi hermana va a morir mañana’. Y me dice ‘¿de qué me estás hablando’.
“‘Sí. Tiene cáncer y yo sé que ella va a morir mañana. Entonces yo mañana no puedo venir, porque va a venir todo el tema del funeral’. Y me dice ‘¡¿pero cómo no nos dijiste antes?!’. Porque dije ‘si yo, que soy el hermano, detengo el mundo por esto, ¿qué va a pasar con sus hijas? Van a entender que tras la muerte de su madre el mundo para ellas se va a detener’. Y una entraba en marzo a la universidad y la otra al colegio.
“Entonces yo dije ‘mi lección es que el mundo continúa. Es una gran tragedia, pero mientras mi hermana, que es la mitad de mi corazón y la mitad de mi vida, se estaba muriendo, yo seguía trabajando y le seguía poniendo onda al trabajo’.
“Porque en mi cabeza mi lección era esa. Mi lección era decirles ‘están sufriendo, pero tenemos que seguir trabajando, ustedes tienen que seguir estudiando’. Porque el temor que tenía es que alguna de ella dijera ‘yo no puedo, no voy a entrar a la universidad, no puedo con esta pena’.
“Entonces esa era mi lección, decirles ‘esta pena nos va a acompañar de por vida, pero la vida continúa’. Lo entendieron. De hecho, antes de que entraran al colegio dije ‘tengo que sacarlas de este trance’ y me las llevé a Cuba.
“Le dije en ese momento a mi jefa ‘yo me voy dos semanas’. ‘Tú no tienes vacaciones’. ‘Perdón, me importan una raja tus vacaciones. Si esto significa que llegamos hasta acá…’ Y ahí yo creo que ella atinó y me dice ‘tranquilo, tómatelas’.
“Porque yo sentía que tenía que hacer un quiebre tan grande en la vida de ellas para tratar de remecerlas y que la pena no las consumiera, porque además es una pena con la que viven hasta el día de hoy”.
