Glamorama
Simón Oliveros en una imagen tomada de la pantalla de Mucho Gusto, Mega, durante el episodio de agresión sexual que vivió en marzo de 2019.

«Me pasó en vivo y en directo. Me metieron el dedo en el h… Yo inicié acciones legales», relata Simón Oliveros

Autor: Equipo Glamorama / 8 abril, 2022

“A mí me pasó en vivo y en directo. Me metieron el dedo en el hoyo… A mí me pasó y fue una mujer», partió contando Simón Oliveros en el último capítulo de La Divina Comida exhibido por CHV.

El periodista conocido por su labor como reportero en las calles para el matinal Mucho Gusto, recordó la situación que vivió en marzo de 2019, mientras realizaba su labor.

Esta fue la conversación en el programa de cocina en el que Oliveros participó junto a Karen Paola, Claudia Pizarro y Camilo Huerta:

Simón Oliveros: “Estaba en vivo y sentí que la señora me metió el dedo hasta adentro. Incómodo, molesto.

“Tomé la palabra. ‘Me acaba de pasar lo siguiente: me acaban de meter el dedo en el poto. Me parece una bajeza’. Y no quedó ahí la cuestión. Yo inicié acciones legales. Fui a Carabineros. Finalmente ella fue amonestada.

“Lo que quisimos hacer nosotros como programa en ese momento, y personalmente yo, fue agotar todos los caminos legales que un hijo de cristiano puede hacer en el caso que te pase eso”

Claudia Pizarro: “¿Y el canal te apoyó?”

Oliveros: “El canal me apoyó. ¿Y a usted le ha pasado una falta de respeto?”

Pizarro: “Me han pasado un montón de cosas. Yo tengo protección policial hace cinco años. Me han hecho encerronas, me han salido persiguiendo con cuchillo.

«Es súper difícil porque igual estamos siendo rostro de dar la cara contra el narcotráfico. Yo sé que ellos son mis enemigos y van a ser siempre mis enemigos. Pero la pelea siempre hay que darla”.

Camilo Huerta: “Pucha, a mí también me ha pasado el tema que te pasó a ti. Terrible. Salir casi desnudo porque me rompieron la ropa, me tocaron entero, me tuvieron que sacar con guardias”

Karen Bejarano: “A mí, cuando me pasó lo de la extorsión, las fotos, yo quise llevarlo más allá. También fui súper criticada y también me vulneraron a mí. Me dijeron que yo había expuesto todo y no me creían. Y finalmente me siguen molestando hasta el día de hoy”.

El episodio al que se refiere Oliveros ocurrió durante un móvil desde las calles de Estación Central con Mucho Gusto.

El profesional hablaba con una transeúnte mientras, al frente suyo, otra mujer comenzó a gritar consignas.

Oliveros le ofreció repetidamente el micrófono y la pantalla para que hablara. La mujer siguió gritando.

El periodista continuó con su entrevista, la mujer se puso detrás suyo y lo agredió en el trasero:

Mujer que agredió al periodista: «“¡Que renuncie Piñera y se soluciona todo esto!

Simón Oliveros: «Señora venga, venga, no grite, le damos el espacio”

Mujer: «¡Yo apruebo! ¡Que renuncie Piñera! ¡La tele miente!”

Oliveros: «Venga, venga… Entonces déjeme terminar mi trabajo con la señora”

Mujer: «¡La tele miente!”

Oliveros: «Le estoy dando el espacio. Si no me va a dejar hacer mi trabajo, lo dejamos hasta acá”

El notero continuó haciendo su despacho con la señora que estaba entrevistando. En pantalla se vio claramente como la mujer que gritaba consignas se detuvo detrás del periodista y lo agrede en el trasero.

Simón Oliveros: «Mira, la señora acaba de pasar detrás mío y me metió el dedo en el poto. Me metió el dedo en el poto dos veces.

«Tengo una rabia tremenda en este momento, voy a contar hasta siete porque lo que acaba de pasar ahora en este momento no puede pasar en Chile.

«Estuvimos hablando el 8M sobre los derechos de las mujeres. Yo tengo una hija, tengo una madre, tengo una esposa, tengo compañeras de trabajo, tengo amigas.

«Respeto absolutamente el valor de la mujer y es totalmente indigno lo que me acaba de suceder a mí. Yo no tengo por qué aguantar, estoy en la calle haciendo mi trabajo, que pase una persona que le dimos el espacio para hablar con nosotros, que pase y me meta el dedo en el culo. Eso es lo que hizo dos veces.

«Yo me siento absolutamente vulnerado, nunca me había pasado una situación así en un contexto que es distinto, un contexto que es de disputa. Le dimos el espacio para que hablara. El que grita no siempre tiene la razón.

«Lo que hizo la señora de meterme el dedo en el culo dos veces, porque eso que lo que hizo y no quiero ocupar eufemismos ni palabras menos, meterme el dedo en el culo dos veces sin que yo quisiera, no corresponde.

«Ese no es el país que yo quiero, que nadie quiere. Lo que acaba de hacer es de una violencia absoluta, tremenda. Me sentí vulnerado en mis derechos humanos y eso no se puede hacer.

«No se pueden sentir en este país con el derecho de meterle el dedo en el culo a nadie, un hombre a una mujer, ni una mujer a un hombre, ni nadie tiene el derecho de meterle el dedo en el culo a nadie. Lo que acaba de pasar acá es grave, es sumamente grave y quiero terminar con eso».