Pamela Díaz y su primer beso: «Con el viento se fueron (los cinco mil pesos). Y se fue él también, porque nunca más me pescó, por culpa de mi mamá…»
“La primera vez que te dan un beso con pasión, te robaron cinco lucas, a los 14 años ¿es verdad eso o no?”, le planteó Julio César Rodríguez a Pamela Díaz en Pero Con Respeto.
La comunicadora, entonces, contó la historia en un capítulo del late de CHV emitido hace una semana:
“Fue antes. Sí. Fue en la esquina. Me mandaron a un supermercado, estaba lloviendo y hacía mucho frío y corría mucho viento (Díaz se crió en Puerto Montt). Y me acuerdo que… Uy, ni me acuerdo al que le di un beso”
Julio César Rodríguez: “¿Cómo que le di un beso?”
Pamela Díaz: “Es que nos besamos apasionadamente. Yo tenía un blazer del colegio y tenía las cinco lucas que me dieron mis papás para ir a comprar pan. Y me demoré como una hora y media o dos horas. Había un galponcito donde se estacionaba un auto de la casa esquina, y ahí me encontré con el chiquillo y nos besamos”
Rodríguez: “¿Pero ya se gustaban un poquito?”
Díaz: “Sí poh, ¿tú crees que a la primera voy a dar un beso? Me gustaba y todo. Y en eso, no me acuerdo si habré metido la mano al bolsillo, porque había un viento horrible, y antes de comprar el pan llega mi mamá a la esquina.
“Me andaba buscando, obvio, aparte que estaba como a cinco cuadras de mi casa, entonces cómo me iba a demorar una hora y media. Entonces llegó en el auto, se bajó y yo dije ‘conchalalora, ¿qué va a decir mi mamá?’.
“Y va y dice ‘¡¿pero por qué te demoras tanto?! ¡Y tú, desubicado, que besas a mi hija!’. Ni que fuera la princesa Diana. Y me pega un palmazo, ‘¡desubicada!’, que no sé qué. El cabro se fue. Que vergüenza.
“Y me dice ‘¡ya, anda a comprar el pan!’. Me voy a meter la mano al bolsillo y no tenía las cinco lucas. ‘¿Cómo cresta le digo a mi mamá que no tengo las cinco lucas porque le di un beso al cabro? Me va a llegar otro charchazo’.
“Me dice ‘¿¡dónde dejaste la plata?!’. ‘Es que se me perdió’. ‘¡Viste que andas puro leseando!’. El cabro nunca más me habló, porque con esa mamá loca que tenía, iba a decir ‘la cabra loca y su mamá más loca’”
Rodríguez: «¿Pero el hombre te robó unos besos y las cinco lucas? ¿O no se sabe el paradero de las cinco lucas?”
Díaz: “¿Y si me robó él?”
Rodríguez: “Yo creo que pudo haber sido”
Díaz: “¿Pero cómo me iba a meter la mano en el bolsillo y no me iba a dar cuenta?”
Rodríguez: “La pasión del beso”
Díaz: “No. Yo creo que con el viento se fueron. Y se fue él también, porque nunca más me pescó, por culpa de mi mamá”.
