Titi
Francisco Kaminski: “Volviendo al caso de mi querida Titi, quería saber si usted, en estos tres años de separación, ¿ha intentado entablar una relación, como le desea al señor Patricio Torres? Ojalá que busque una pareja y sea feliz ¿Usted ha incursionado en estos años? ¿Ha conocido a alguien? ¿Se ha dado esa oportunidad de abrirse a una relación?”
Titi García-Huidobro: “No, nada, absolutamente nada, nada…”
Kaminski: “O sea, lleva tres años…”
Andrés Baile: “¿Ni una cita a ciegas, nada de eso?”
García-Huidobro: “Nada”
Kaminski: “¿Le creen o no?”
Nataly Chilet: “Por supuesto que sí”
Kaminski: “La Naty le dice que ‘por supuesto que sí’”
García-Huidobro: “Entremedio recuerden que tuvimos una pandemia. Pero no, de verdad. Mira, sin tener que vender una pomada que no es necesaria, porque podría perfectamente estar con alguien y decir ‘sí, estoy feliz’, o ‘’sí, tuve algún pololo o conocí a alguien’, actualmente no me interesa”
Kaminski: “No me llama tanto la atención porque hoy día es muy común. De hecho, vi una declaración tuya que decía que cinco años estuviste. Me imagino que ya rompiste esa brecha…”
Yasmín Valdés: “No, vamos para los seis ya”
García-Huidobro: “Viste”
Kaminski: “Sin nada, sexualmente hablando”
Valdés: “Es que no me gusta nadie”
García-Huidobro: “Ese es el problema”
Valdés: “He salido a comer, he hecho varios intentos. No he dicho que no quiero salir con nadie”
Kaminski: “Y Nataly Chilet, ¿cuánto tiempo lleva en abstinencia sexual?”
Chilet: “Yo, poquito”
Kaminski: “Me gustaría hablarle a la Titi, obviamente a ti, Yasmín, a la señora en su casa que está en una situación similar, quizás de años de abstinencia, decirles a todas ustedes, chiquillas, que el príncipe azul no existe. El hombre perfecto no existe. Y los que existíamos, estamos ocupados…”
Chilet: “No solamente no existen, sino que el príncipe azul se destiñe al primer lavado. Ese es el problema”
García-Huidobro: “Es que yo creo que, en el caso de Yasmín, y quizás el mío, o mucha gente en la casa, no es que ande buscando el príncipe ideal. Nadie lo es. Nosotros tampoco lo somos. Pero llega el momento en que uno está preparado para estar con alguien y encuentra el que te mueve las hormonas”
Valdés: “Lo que pasa, Titi, que una está tan madura que tampoco se conforma con lo mismo que se conformaba antes. Antes yo me conformaba con que fuera simpático y buena onda. Y después te das cuenta que te molesta que le guste el carrete o sea desordenado”.
