Glamorama
Julián Elfenbein en una imagen tomada de la pantalla de Pero Con Respeto, en Chilevisión.

«¿Pero quién no tiene cicatrices en la vida? Yo no me quejo… De hecho, me ha tocado operarme y trabajar al día siguiente», responde Julián Elfenbein sobre sus diversas cirugías

Autor: Equipo Glamorama / 27 diciembre, 2022

“Tienes hartas cicatrices, ¿cómo lidias con eso?”, le consultó Julio César Rodríguez a Juilián Elfenbein, refiriéndose a las diversas cirugías, algunas de ellas más difíciles que otras, a las que se ha tenido que someterse el animador de Pasapalabra.

Entre otras intervenciones, en 2004 el periodista de 50 años fue operado de un tumor en el cerebro. En 2013 sufrió un ataque cardiaco. Ultimamente ha debido realizarse tres intervenciones debido a la lesión en la clavícula.

Así continuó la conversación en Pero Con Respeto, late que conduce Rodríguez en Chilevisión:

Julián Elfenbein: “¿Pero quién no tiene cicatrices en la vida? Yo no me quejo, estamos viendo ahora lo que está pasando en Viña, uno tiene problemas que son nada al lado de eso. Yo he tenido la fortaleza para poder ir lidiando con mi cicatrices, las físicas y las no físicas.

“Y en ese sentido he aprendido de las alegrías y de los dolores, como todo el mundo en la vida, entonces no soy alguien que se ande quejando. De hecho, me ha tocado operarme y trabajar al día siguiente, porque también tengo un compromiso.

“Tengo varias, pero he ido lidiando en general bien con ellas. A veces uno se agota, pero…”

Julio César Rodríguez: “Cuando estás en cama, cuando te van a operar de nuevo, estás mirando el techo, solo, porque…”

Elfenbein: “Porque uno es solo”

Rodríguez: “Lo dejo ahí… ¿No dices ‘por qué me pasa tanta cosa’?”

Elfenbein: “No. Cambié la pregunta. Al principio sí. Pero la cambié porque no me gusta andar como si uno tuviera la nube en la vida. Soy un tipo afortunado, porque soy exitoso en mi trabajo, porque tengo tres hijos maravillosos, tengo una madre, hermanos, familia, amigos de toda la vida. Por lo tanto, no me podría quejar.

«He tenido sus cositas, físicas y no físicas, pero no me podría quejar. Y la pregunta no es ¿por qué de nuevo a mí?. Es ¿para qué?. Y he ido aprendiendo no sé qué, pero he ido aprendiendo de la vida”

Rodríguez: “¿Pero has encontrado alguna razón? Porque una operación más y te hacemos la Teletón a ti solo”

Elfenbein: “No sé si he encontrado una razón. He encontrado que soy un aprendiz de la vida. Yo creo que cuando a mí me pase algo definitivo, o sea, cuando ya no esté aquí quiero decir…”

Rodríguez: “No. Se puso tonto”

Elfenbein: “Todos nos vamos a ir alguna vez. A los 90 años, si yo no estoy alguna vez, me gustaría que se diga ‘fue una buena persona, trató de enseñarnos de las cosas que le pasaron’. Y eso es todo, no quiero nada más en la vida”

Rodríguez: “Yo de vez en cuando digo ‘Julián, con todo lo que le pasa’, porque tú transmites alegría y eres un tipo muy alegre, no solo en pantalla, ¿es genuino esto de que le das vuelta el tornillo?”

Elfenbein: “Cien por ciento. Por eso te digo, yo trato de transmitir alegría. Ojo: he tenido una vida muy afortunada y eso no lo puedo negar. Por lo tanto, no me queda otra que tratar de transmitir alegría, que es como mi misión en la vida.

“Y también las enseñanzas que voy aprendiendo de las cicatrices que te van quedando, pero son solo cicatrices finalmente”

Rodríguez: “¿Pero de repente llegas a tu casa y está el Julián que se derrumba y que dice ‘estoy agotado, quiero parar’?”

Elfenbein: “A veces me pasa, porque me toca estar… Mi vida es dedicarme a mis hijos, a la pega y en general también estoy harto solo. Pero no tiene nada de malo. Me encanta estar solo conmigo mismo.

“Y a veces pienso y digo ‘me pasó esto en el día, viene esto’. A veces uno se agota, pero yo no soy un tipo depresivo de estado anímico o que me angustie permanentemente. Tampoco soy un tipo que esté trabajando permanentemente en mí.

“No hago terapia a cada rato, de hecho no me hago, me he hecho alguna vez, pero no soy muy constante en ese tipo de cosas, entonces he ido aprendiendo solo”.